Comunicado 18 de marzo 2014
Como decíamos la semana pasada nos resulta triste e INEXPLICABLE aceptar como SOLUCIONES a los desastres provocados por la situación de crisis y recortes, las dichosas EXTERNALIZACIONES, que no son sino privatizaciones de servicios que pudiéndose realizar en lo que había llegado a ser nuestro hospital de referencia (de hecho ya se hacían en él), se realicen en clínicas concertadas de nuestra ciudad o de la comunidad o de comunidades vecinas, por profesionales ajenos a los pacientes y sobre ajenos todo al sistema. Por eso nos alegra enormemente:
- • La contratación de facultativos en el servicio de Anatomía Patológica para asumir el trabajo que se hacía antes, y que se estaba realizando fuera del sistema desde hace dos años: las citologías vaginales, y
- • la reestructuración de la zona de paritorios para habilitar un nuevo quirófano que aumente la actividad quirúrgica; aunque nuestro Hospital haya sido de los últimos en verse tocado por la medida de la Consejería de crear nuevos quirófanos para disminuir la listas de espera.
Nos gustaría que esta política fuera la línea a seguir de ahora en adelante, pues seguimos pensando que es mucho más rentable y mejor para nuestros pacientes, atenderlos en nuestro Hospital aprovechando las infraestructuras que tanto nos han costado conseguir y disponiendo del personal necesario para realizar una actividad de calidad. Esperamos que estas medidas sean reales y sin "letra pequeña" ni vuelta atrás, y se amplíen al resto de procesos que se siguen "externalizando".
Seguimos sin creernos que concertar servicios con clínicas privadas sea más eficiente, (no hay nadie todavía que haya sacado los datos de forma precisa comparando con el gasto público real), pero sobre todo sabemos que no es ético derivar a nuestros pacientes fuera de nuestro hospital ni fuera de nuestro sistema, después de haber provocado el deterioro de esta situación, y sobre todo atenta contra la calidad y el buen hacer que le debemos a nuestros pacientes y al sistema público que defendemos.
Hablando de deterioro… desde la plataforma siempre hemos denunciado que tras la crisis se escondían a veces intereses sucios, sucio es el dinero que va de mano en mano. Se deterioran servicios y la imagen de la sanidad pública y a cambio ganan las empresas privadas, las cuales son las que en este río revuelto van a conseguir las mejores piezas. Las listas de espera ya han generado lo que en realidad buscaban; que pacientes que no pueden esperar más porque están aguantando mucho dolor, incomodidad, deterioro de la movilidad, preocupación extrema, etc… al final accedan a realizarse las intervenciones quirúrgicas en clínicas de pago. Este caso que exponemos ha saltado a la prensa en esta última semana. Una vecina de Santa Oliva (Tarragona) de 66 años. No podía aguantar más el dolor y se sentía incapaz de soportar el año que los profesionales le decían que tenía por delante. Al final, accedió a pagar 9.300 euros para ser intervenida en unos días por la vía privada en el mismo hospital y por los mismos médicos que debían atenderla por la sanidad pública.
Debemos felicitarnos por contar en España con profesionales de la seguridad que velan y hacen un buen trabajo (son trabajadores de la función pública, policías) en este caso La Brigada Judicial de Valencia que llego a detener hasta a cinco personas, todas extranjeras, por su presunta implicación en un intento de compraventa de órganos. En concreto, para que un rico libanés recibiera un trasplante de hígado. Es la primera vez en España que la policía efectúa una operación de este tipo y lo hace al amparo de la reforma del Código Penal en junio de 2010, que castiga con penas de prisión a “los que promuevan, favorezcan, faciliten o publiciten la obtención o el tráfico ilegal de órganos humanos ajenos o el trasplante de los mismos”.
La investigación comenzó en el verano de 2012, tras la denuncia de una ONG, que alertó de que había un grupo de personas que estaban ofreciendo importantes sumas de dinero a inmigrantes irregulares por vender parte de su hígado para un trasplante. Fue entonces cuando las autoridades sanitarias de Valencia detectaron también que había una serie de personas que se habían estado sometiendo a diversas y muy complejas pruebas médicas en una clínica privada de esa comunidad. La alerta llegó hasta la Organización Nacional de Trasplantes dependiente del Ministerio de Sanidad, que activó todas las alarmas del sistema que supervisa los trasplantes. En España, pagar o lucrarse con la compra o la venta de órganos está prohibido y penado.
El sistema de trasplantes en España es líder mundial, con 4200 trasplantes anuales y es por ello que este rico libanés quisiera venir a nuestro país para realizarse en una clínica privada un trasplante de su hígado enfermo por uno sano (de una persona necesitada). Este señor por vivir en España, no podía optar a una donación de cadáver, pero si de un donante vivo, siempre que sea familiar o allegado. Todas las donaciones deben ser estrictamente altruistas. El caso evidencia que los controles del sistema público funcionan.
El miércoles pasado compareció el consejero de sanidad de CLM ante las cortes regionales, para informar de lo que estaba ocurriendo con las listas de espera. Una vez más volvió a invertir más tiempo en criticar al grupo de la oposición que en explicar los verdaderos motivos del aumento de las listas de espera y de la situación caótica de las urgencias en diferentes hospitales. Según CCOO, las cifras de las listas de espera quirúrgicas y/o diagnósticas exhibidas por Echániz, son imposibles de valorar porque es imposible contrastarlas. Seguimos asistiendo al bochornoso espectáculo del PP donde mentir y engañar a los ciudadanos se ha convertido en su verdadera seña de identidad. Cifras que nadie sabe de dónde salen pero que no tienen la más mínima vergüenza en exhibir a sabiendas de que, sólo necesitamos salir a la calle y preguntar a los ciudadanos, para conocer el descontento con las políticas sanitarias que están llevando a cabo. No ha querido explicar durante su comparecencia por qué los ciudadanos/as tienen que viajar más de 150 kilómetros y a horas intempestivas para que se les realice una intervención quirúrgica.
Sigue también sin explicar cuánto dinero dedica a pagar dichas intervenciones en centros privados de dudosa garantía. Sigue sin contarnos cuántos ciudadanos rechazan la propuesta y qué pasa con ellos. Sigue sin contarnos por qué se dan indicaciones expresas de no informar adecuadamente sobre la Ley de Garantías. Sigue sin contarnos cómo son los postoperatorios. Sigue sin contarnos por qué muere gente en los pasillos de los hospitales. Eso sí, lo de la herencia recibida no falla, está siempre presente en cualquier guión que se preste. Lo repiten como papagayos, todos al unísono, mientras los ciudadanos asistimos al mayor saqueo de lo público y al mayor índice de corrupción política de la historia de nuestra democracia.
Y, por último, decirles, que esta mañana hemos recibido un correo de ALCER, donde se nos comunica que hoy van a presentar 1800 firmas para exigir un nefrólogo de guardia. Denuncian que, la falta de estos especialistas en el hospital, ha provocado grandes perjuicios para los enfermos renales y hasta muertes.
¡¡¡NO AL SAQUEO NI A LA PRIVATIZACIÓN DE NUESTRA SANIDAD PÚBLICA!!!