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“Me enorgullece representar a Cuenca en Mister International”

Carlos Marfil Reina, que aspira a ser elegido el hombre más guapo del país entre otros 51 candidatos, tiene 23 años y estudia Ingeniería Química en Málaga
“Me enorgullece representar a Cuenca en Mister International”
Foto cedida
30/07/2025 - Eduardo M. Crespo

Con tan solo 23 años y un futuro prometedor, Carlos Marfil Reina será quien represente a la provincia de Cuenca en el certamen ‘Mister International Spain 2025’ que se celebra en la localidad tinerfeña de Los Realejos desde el 23 al 31 de julio. Estudiante de Ingeniería Química y cinturón negro de judo, Carlos Marfil Reina combina ciencia, disciplina y carisma en un “viaje personal” que va más allá de la belleza.

Carlos Marfil está a punto de cerrar una etapa clave en su vida porque en septiembre, nos cuenta, entrega su Trabajo de Fin de Grado de Ingeniería Química en la Universidad de Málaga. Pero mientras termina sus estudios, ha decidido embarcarse en una aventura completamente distinta: participar en uno de los certámenes de belleza masculina más importantes del país, el Mister International Spain.

“Soy una persona constante, perfeccionista y humilde”, se describe Carlos, quien se adentra por primera vez en el mundo de los concursos de belleza animado por la experiencia de un primo suyo, que participó el año anterior. Tras quedar segundo finalista en la fase provincial de Málaga, surgió la posibilidad de representar a otra provincia, y no dudó en elegir Cuenca por todas las cosas que le unen a ella desde muy pequeño. “Es una ciudad que me encanta, he estado con mi familia muchas veces y tengo un montón de amigos allí. Me representa y quiero hacer un buen papel en el certamen”, explica con ilusión.

 

De la química a la pasarela

Desde pequeño, Carlos Marfil ha mostrado interés por la ciencia. Eligió su carrera universitaria motivado por su “facilidad con las matemáticas” y su “pasión por la química”. En su horizonte profesional se vislumbra, nos dice, un futuro en el sector petroquímico, una industria que le fascina por su complejidad técnica y su importancia estratégica: “Me gustaría trabajar en procesos como la destilación del crudo y la obtención de fracciones del petróleo para combustible”.

Pero Carlos Marfil no es solo ciencia. Desde los cinco años practica judo, una disciplina que le ha aportado “perseverancia y autocontrol”. Es cinturón negro y ha competido en numerosas ocasiones, lo que le ha ayudado también a construir una mentalidad firme, algo que considera esencial para afrontar retos como este certamen de belleza.

El próximo gran paso es este 30 de julio en Tenerife, donde se celebrará la gala final del Mister International Spain. Durante una semana, los participantes del evento convivirán, participarán en pruebas físicas y de expresión, y se someterán a varias entrevistas con el jurado. Carlos Marfil, nos cuenta, se prepara para ese momento con rutinas de gimnasio, una alimentación equilibrada y sesiones de oratoria para mejorar su dialéctica ante el público.

“Salir de tu zona de confort es un reto. Este tipo de experiencias te hacen crecer personalmente. Te obligas a interactuar, a abrirte, a mostrarte tal y como eres”, comenta sobre el impacto que este certamen está teniendo en su desarrollo personal.

Aunque tiene claros sus objetivos profesionales en el ámbito de la ingeniería química, Carlos Marfil no descarta nuevas oportunidades si se presentan: “Estoy abierto a lo que venga: modelaje, redes sociales, fotografía, campañas publicitarias... Todo suma”. Para él, el certamen no es un punto de llegada, sino un trampolín hacia otras múltiples posibilidades.

Nacido en Málaga, Carlos Marfil no oculta el orgullo que siente por representar a Cuenca. “No dudé en escogerla, tiene algo especial y me siento muy identificado con su esencia. Me gusta su gente, su gastronomía y me siento muy a gusto allí”, concluye.

Carlos Marfil no es solo un rostro bonito en un concurso de guapos. Es la prueba de que la belleza también puede tener una mentalidad de lucha y un corazón agradecido. Cuenca estará representada por un joven que simboliza el equilibrio perfecto entre mente, cuerpo y valores.