“Cuenca tiene un interés cautivador, es inenarrable”

Ha cumplido su sueño. Víctor Huerta ha publicado ‘Cuenca y su catedral’, la primera guía práctica que permite a conquenses y visitantes recorrer las callejuelas del Casco Antiguo a través de la experta mirada de este guía turístico que ha trabajado en el sector durante casi cuarenta años. 

El reto era teletransportar al lector a la ciudad de los rascacielos a través de las palabras de Huerta, ya que eran muchos los visitantes y libreros locales los que echaban en falta un manual de estas características. 

La oportunidad llegó gracias a la Asociación Cuenca Abstracta, de la que Víctor Huerta es socio fundador, y la Editorial Alfonsípolis, quienes le propusieron redactar el texto, algo que tuvo que pensar detenidamente porque “soy bueno hablando pero malo escribiendo”, confiesa. Sin embargo, el parón por la pandemia le animó a dar el paso y durante los meses de confinamiento se embarcó en investigaciones sobre la Catedral, consultó libros y finalmente se puso a escribir, eso sí en la obra ha dejado plasmado su sello propio. “Hay chistes y anécdotas. Esta guía soy yo mismo”, explica

Tenía clara la idea. Su objetivo era escribir una visita global por Cuenca, aunque haciendo mucho hincapié en la Catedral porque “es la gran desconocida para las personas que viven aquí”, dice. 

Y es que, Huerta siente absoluta devoción por esta edificación que preside la Plaza Mayor y por ello destinará todos los beneficios económicos que obtenga de la venta de la guía a que se acometan obras de mejora y restauraciones dentro de ella. “Creo que necesita mucha ayuda y no se está haciendo lo suficiente. Hay un plan de catedrales que en otras comunidades se está cumpliendo y aquí no”, explica. 

La visita figurada que abarca 60 hojas comienza en el Barrio del Castillo, continua por la Calle San Pedro, se desvía por Julián Romero hasta llegar a la Plaza Mayor y adentrarse en la seo para después llegar hasta la Torre de Mangana y acabar en la Calle Canónigos observando los rascacielos al borde de la hoz del río Huécar. De todos estos lugares dice no poder elegir ninguno porque “toda la ciudad de Cuenca tiene un interés cautivador, su belleza y lo que esta ciudad transmite es inenarrable”, asevera. 

En sus cuatro décadas de trayectoria profesional ha forjado un estilo propio que define como didáctico porque “me gusta formar a la gente, sobre todo a los más pequeños” y, aunque ahora ha bajado la intensidad de trabajo se ha ofrecido a enseñar la ciudad a toda la tercera edad castellanomanchega. 

A parte de guía turístico y escritor también ha dedicado gran parte de su vida a formar a otros guías turísticos. En este ámbito, Huerta cree que la clave del éxito está en “conocer muy bien el tema sobre el que estas hablando, creértelo y, por encima de todo, tener poder de transmisión porque la virtud de un guía está en que con la voz comuniques y hagas a la gente imaginar lo que ya no está”.

Él desde luego lo ha conseguido, no solo viva voz mientras que enseñaba la ciudad a los turistas, sino también a través de las palabras. Por ello ‘Cuenca y su Catedral’ ha sido todo un éxito de ventas en las librerías conquenses, tanto que hasta ha llegado a agotarse y finalmente se presentó el jueves 9 de septiembre en el Centro Cultural Aguirre durante un acto presentado por Miguel Romero, cronista oficial dela ciudad, y que atrajo a numeroso público.