"Con 17 años me di cuenta de que no podía vivir sin subirme al escenario"

Con doce años, Tania Orozco Alfaro (Ledaña, Cuenca, 1991) empezó a hacer sus pinitos en el mundo de la interpretación de la mano del grupo de teatro de su instituto y sin más pretensiones que la de pasar un buen rato. Pero ya de adolescente, su papel de Hécuba en Las Troyanas le valió en 2008 uno de los Premios Buero de Teatro Joven de la Fundación Coca-Cola y aquel galardón marcó un punto de inflexión. “Pensé que igual no lo hacía tan mal y me di cuenta de que no podía vivir sin subirme al escenario”, rememora ahora la actriz, que ha fundado su propia compañía, Tyrsova Producciones, con la que recaló este jueves en el Teatro Auditorio de Cuenca con la obra La Galana.

“Llevo 18 años en los escenarios. Me he recorrido toda España, desde Bilbao a Málaga”, explica Orozco, que este jueves se subió a las tablas del espacio conquense para dar vida a Juana Galán, una heroína manchega que luchó contra los franceses en la Guerra de la Independencia.

Además de encarnar a este personaje, la actriz se ha encargado también de la producción de la obra -dirigida por Charo Romero- y de la adaptación del texto, que está basado en una novela del valdepeñero Carlos Isidro Muñoz de la Espada, que también se ha ocupado del vestuario, en el que también ha participado la abuela de Orozco, que le ha arreglado las enaguas para el espectáculo.

La actriz da vida a Juana Galán a través de un monólogo dramático, acompañada por los personajes masculinos a los que, a través de la expresión corporal y sin utilizar la palabra, representa el bailaor Cristóbal Muñoz. “Normalmente hay monólogos masculinos y bailan las mujeres. Hemos querido darle la vuelta a eso”, defiende.

“Llevaba años haciendo comedia pero yo vengo del teatro grecolatino y me apetecía mucho volver al drama. Así que busqué mujeres ilustres de Castilla-La Mancha y me encontré con La Galana. Y pensé que había que sacar a la luz esta historia desconocida para la gran mayoría”, rememora.

Por ello, para la actriz, representar este papel supone tanto escenificar el empoderamiento de las mujeres como poner en valor la historia de Castilla-La Mancha. “Tenemos una heroína manchega y doscientos años después no se la conoce en su tierra. Y así con todo. En nuestra región hay muy buenos profesionales pero no nos fijamos y valoramos más lo que viene de Madrid o de otros sitios”, lamenta.

La obra, que debería haberse estrenado en junio de 2020 y tuvo que posponerse después hasta cinco veces, vio la luz finalmente a finales de marzo en Valdepeñas, la cuna del autor de la novela que inspira La Galana. Tras la actuación en Cuenca, la compañía tiene ya contratadas una decena de representaciones para la temporada de primavera y ya empiezan a cerrar más fechas de cara al verano. Iniesta, Quintanar del Rey y Ledaña son algunos de los municipios conquenses que visitarán. “Esperamos que sea una gira fantástica y podamos llevar el nombre de Juana Galán por todos los sitios”, desea la actriz, que primero estudió Filología Hispánica y después, Arte Dramático.

“Nos ha salido una obra muy bonita y tengo un equipazo. Estoy muy orgullosa”, alardea Orozco, que recuerda los orígenes de esta compañía que montó sola hace siete años, trabajando en la hostelería para poder financiar los monólogos y comedias que ha ido llevando a escena. “Y ahora, detrás de La Galana hay unas 15 personas”, precisa.

“Estuve de Erasmus en Praga y vivía en la calle Tyrsova. Allí había mucho cariño y quise traerme todo eso para acá y por eso le puse ese nombre a mi compañía"

La compañía no para y, además de esta gira, también está llevando a escena otras obras como Gloria limpiadora y manchega, un monólogo humorístico protagonizado por Charo Romero. “Es muy divertido. He visto a Charo medirle el culo a palmos a un chico del público”, cuenta Orozco.

Además, sigue de gira otro espectáculo de la compañía, De luces y sombras, una obra que entremezcla danza y música en directo de la mano de Cristóbal Muñoz.

Por otro lado, la ledañense está escribiendo junto a Juanjo Albiñana y Charo Romero una comedia titulada Relación abierta que, si todo va bien, quieren estrenar en noviembre.

Pero ¿de dónde viene el impronunciable nombre de la compañía? “Estuve de Erasmus en Praga y vivía en la calle Tyrsova. Allí había mucho cariño y quise traerme todo eso para acá”, admite.