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“Es un año excepcional, pero no podíamos faltar”

Bajo la situación de ‘nueva normalidad’, Estival Cuenca celebrará su novena edición “para promover la cultura y nuestra ciudad en un festival de referencia nacional”
“Es un año excepcional, pero no podíamos faltar”
Foto: Mario Gómez
26/07/2020 - Mario Gómez

En el confinamiento, los artistas, cantantes, músicos y demás figuras del ámbito cultural fueron todo un pilar sobre el que multitud de ciudadanos se apoyó para hacer más llevadera la dura situación de encierro. Una situación que contrasta con las duras restricciones que debe afrontar cualquier evento de ámbito cultural que quiera celebrarse ante la normativa de seguridad, siendo la restricción de aforo la que afecta de lleno a los espectáculos por repercutir de una forma directa en el ámbito económico de promotores y artistas.

Pese a ello, y a la estricta normativa y protocolos de seguridad, Estival Cuenca ha decidido dar un paso adelante y celebrar su novena edición, del 25 de julio al 1 de agosto, con un cartel con Rodrigo Cuevas, Benavent&Di Geraldo&Pardo, Derby Motoreta´s Burrito Kachimba o Rosario ‘La Tremendita’, entre otros, como platos fuertes. Un movimiento que podría parecer tambalearse entre lo valiente y lo alocado, pero que defiende su director, Marco Antonio de la Ossa, en pro de “seguir promoviendo nuestro festival, nuestra ciudad y la cultura y la música, siempre y cuando se cumplan las medidas de seguridad”.

¿Cómo describirías que ha sido llevar a cabo esta edición de Estival?

Sin duda, un reto. Es como cada año, pero este año era también un ejercicio de responsabilidad. La situación es la que es, pero consideramos que la cultura ni la música deben parar, y más cuando otras ciudades han demostrado que es posible. A parte, la gente ha preguntado constantemente si íbamos a celebrar el festival o no, nos han empujado un poco a ello, por eso es de agradecer a ellos y a los colaboradores que podamos disfrutar de esto.

¿Cómo ha sido el trasladar una programación y todos esos artistas a estas nuevas fechas?

Algo hecho como si fuera un encaje de bolillos y a contrarreloj. Multitud de llamadas, ver que no coincidiera con otros festivales, agenda de los artistas, etc. Al final, entre todos hemos colaborado y logrado ajustarnos para cuadrar fechas.

Aun así se han caído del cartel inicial Santiago Auserón, el dúo de David Broncano y Mario Mora o Miguel Poveda, premio Manuel Margeliza de esta edición.

En el caso de Miguel Poveda y Santiago Auserón se requería de un escenario enorme que no ha sido posible con esta ‘nueva normalidad’. Por otro lado, tanto Broncano como Mario Mora nos decían que era necesaria la intimidad de un teatro, por la particularidad de su espectáculo, y no es posible hacerlo por el momento en el Auditorio. Pero tengo claro que vendrán, el sí lo tenemos y sólo es necesario que la situación mejore. Además, Miguel Poveda está encantado de haber recibido el premio y sólo es cuestión de ajustar una nueva fecha, esperemos que en otoño.

No han sido las únicas bajas, digamos que Estival en esta edición se ha quedado con su esencia más íntegra, los conciertos.

Por desgracia sí. Hemos tenido que renunciar a iniciativas como el ‘Estival didáctico’, con esos talleres musicales en familia, o el ‘Estival Inclusivo’ y ‘Estival Teatro’, que siempre nos alegra con la actuación de los chicos de Aframas. Pero son espacios que esperamos recuperar en 2021, al igual que la iniciativa de la música para madres embarazadas o recién nacidos, con la actuación de ‘Soprano y Arpa’, que ya estuvo el pasado año en Estival, y una psicóloga de la Universidad de Castellón. Esto está encaminado a la educación musical desde que nacemos y esa idea de que, más que nunca, Estival Cuenca sea para todos los públicos. Por el contrario, si mantenemos el ‘Estival Científico’ y ese encuentro internacional de docentes para noviembre, esperemos que de forma presencial.

"Prometemos una experiencia enriquecedora, y todo con la seguridad por bandera”

¿Cómo van a ser los conciertos de esta edición atendiendo a las medidas de seguridad?

Pues yo suelo decir que se parecerán a un concierto de música clásica. Aforo limitado a un tercio, con asientos separados, uso obligatorio de mascarilla, se tomará la temperatura al entrar, desinfección de manos y no habrá servicio de barra, con lo que cada persona deberá traer su botella de agua de casa.

¿Hasta qué punto condiciona lo que ocurra en este Estival a las futuras ediciones?

Hablamos mucho de 2021, pero no sabemos con exactitud como estaremos. Veremos qué ocurre aunque la situación es muy difícil. Sí tengo claro que décimo aniversario tiene que haber, somos muy cabezones. Nacimos en mitad de una crisis económica y superaremos esta crisis sanitaria. A partir de ahí ya se verá, mientras tanto disfrutaremos de esto y lo haremos sabiendo que es lo que nos gusta, esperando que todo salga bien.

¿Qué mensaje lanzas, tanto a aquellos que acuden año tras año a Estival Cuenca, como a esas personas que puede que sea su primera vez o estén dubitativas de hacerlo?

Pues que es un año excepcional, pero no podíamos faltar. Se puede ver la parte negativa, pero también está el lado positivo que es ver que gracias a lo que se genera entre la gente, la organización, los artistas, empresas, etc. se va a poder disfrutar de musica de muchísima calidad en directo en Cuenca, que se hará de la mejor manera posible, prometiendo una experiencia muy enriquecedora y que todo será con la seguridad por bandera. La cultura ha estado ahí durante el confinamiento y es hora de devolverle ese favor. La música es cura, no parte de la enfermedad, por eso animamos a que vengan a disfrutar de Estival Cuenca.