"En Cuenca hay más amantes de la espeleología de lo que nos creemos"
El mundo subterráneo ya no solo es cosas de unos pocos aficionados, cada vez más amantes de la aventura se adentran en los lugares más oscuros y profundos de la geografía conquense con el objetivo de conocer estos recónditos parajes.
Con tan solo seis meses de vida David Alcalde (Cuenca, 1987) ya visitaba cuevas de fácil acceso en brazos de su padre, quien le contangió la pasión por la espeleología. Ahora, con 32 años, suma más de 90 cuevas visitadas. “Mi hermano y yo hemos cogido el relevo de mi padre, continuamos con el trabajo que había empezado”, dice Alcalde.
Desde hace tres años decidió federarse y llevar su afición con seguridad a un nuevo nivel. “Con la cabeza asentada, mi hermano y yo decidimos invertir en esto, comprarnos material y tecnificarnos”, pasando así de “cuevas horizontales fáciles” a sus primeras simas como la de las Palomas o a las más duras de más de 40 metros de profundidad. “Hasta ahora lo máximo que he bajado han sido 98 metros”, señala el espleólogo, que como curiosidad apunta que en todas las cuevas hay “palos y huesos”, aunque lo más llamativo que encontró fue una calavera de tejón, solo la cabeza.
PLANIFICACIÓN
Para lanzarse a esta aventura es necesario un rodaje y unos conocimientos previos, por eso David y su hermano, compañeros también en el subterráneo, aprendieron a “montar instalaciones, anclajes, las cuerdas, nudos, instrumentos que acompañan a la cuerda...etc. Así como métodos de salida en caso de inconveniente”.
También es importante la información previa del lugar, bien “a través de catálogos antiguos, recuerdos de mi padre o a través de la asociación en la que estoy federado”, aunque sostiene que lo más llamativo es “encontrar cuevas donde no se hayan metido antes y no hayan investigado, que ya hemos encontrado varias”. Una máxima de la espeleología es ir siempre acompañado, mínimo dos personas, aunque, con el paso del tiempo, es más fácil encontrar compañeros con ganas de probar. “En Cuenca hay más amantes de la espeleología de lo que nos creemos, estamos conociendo a mucha gente de aqui y que viene de fuera”. Esto se debe a que la provincia es una “zona privilegiada para practicarlo”. Alcalde considera que aunque “Cantabria es la meca”, de la zona centro debe ser uno de los lugares “con mayor número de cuevas”.
"La gente dice que les entra angustia solo de ver las fotos, por los espacios reducidos, para mi supone una liberación”MOMENTOS DE TENSIÓN
A pesar de la planificación previa y la experiencia, Alcalde y el resto de espeleólogos que le acompañan han vivido situaciones complicadas que les han hecho recular en alguna expedición. “Tiempo atrás nos metimos en una cueva activa -las que tienen agua- y fuera estaba granizando. Cuando llegamos a la zona inundable nos asustamos porque vimos que tenía mucha agua y tuvimos que dar la vuelta rápidamente”, recuerda el espeleólogo.
Este tipo de percances se solucionana con “tranquilidad y pensando bien los movimientos”, señala, “al igual que cuando en zonas estrechas te quedas enganchado”. en Cuenca además, uno de los peligros en sus cavidades es “la falta de oxígeno”, debido a que en época estival “muchas veces baja el nivel y es necesario bajar con un medidor”.
AVENTURA AL DETALLE
De un tiempo a esta parte, no solo los aventureros que se acercan a Cuenca pueden disfrutar de estos espectaculares rincones, David Alcalde también detalla sus aventuras en su blog Alma Errante de Estos Montes. “Con este espacio son muchos los que contactan con nosotros para que les demos información de alguna cueva a la que ya hemos ido”, señala, aunque otros muchos se asustan al ver las imágenes. “Dicen que les entra angustia de verlo, pero yo creo que es lo más llevadero”.
En el futuro, espera subir otro peldaño y topografiar las cuevas. “he leído muchos libros sobre el tema y me gustaría hacer un pequeño estudio”.
