El derbi conquense disputado entre el CD Quintanar del Rey y la UB Conquense dejó en San Marcos un lamentable episodio extradeportivo. Nacho Ruiz, jugador del Conquense, denunció los insultos homófobos y machistas recibidos durante el partido y, tras la repercusión que ha tenido su manifiesto, ha comparecido ante los medios en rueda de prensa para aclarar lo sucedido y la conclusión es clara: este tipo de actitudes no tienen cabida en el deporte.
El lateral, arropado de compañeros y con representación del cuerpo técnico y la directiva del club, ha comenzado la comparecencia esclareciendo lo ocurrido en el terreno de juego. “Es un episodio bastante desagradable, empezó el partido y desde la grada empezaron con los insultos que puse en el comunicado: maricón, maricona, niña, niñata, insultos como hija de puta, femenina, pobre de tu madre que no tiene un hombre sino una niña…”, traslada Ruiz, que jugó todo el partido, debido a decisiones técnicas, pegado a la banda de donde procedían los insultos. Le transmitió al árbitro lo que estaba ocurriendo y desde megafonía se comunicó que cesasen, mientras que en el acta se reflejó que se habían producido insultos xenófobos y racistas, a lo cual Ruiz apuntó que también habían sido machistas y homófobos.
“Futbolísticamente no me afecta, pero estas cosas no deberían ocurrir en pleno siglo XXI. Estas personas no deberían venir a los campos de fútbol y es lo que intento transmitir: que sean para animar y disfrutar. Hay muchos niños que vienen a vernos jugar y gente en la grada escuchando estas cosas”, lamenta el jugador, quien confirma que los insultos provenían de una zona concreta de la grada. Ruiz confirma que, además del comunicado, ha sido contactado por Pedro Navarro, presidente del CD Quintanar del Rey, quien le transmitió su descontento con lo sucedido y también que el club está localizando a los infractores para tomar medidas. En lo personal, el jugador también está valorando con la AFE –Asociación de Futbolistas Españoles– denunciar lo ocurrido.
La única parte positiva de este desafortunado hecho es que, tras los insultos, se muestra también el arropador apoyo de una inmensa mayoría que condena lo ocurrido. “Me he sentido muy arropado durante estas horas, es increíble el apoyo que he recibido no solamente del cuerpo técnico y del club. En redes sociales ha sido increíble”, traslada el joven de 28 años, reconociendo que no esperaba que su denuncia tuviese tanta repercusión –ya que se han hecho eco varios medios a nivel nacional–. “Lo hago para que los que estemos en el terreno de juego no permitamos este tipo de cosas, es algo que se tiene que zanjar. Espero que haya más jugadores que se pronuncien y que vayamos teniendo voz para disminuir todo esto”, concluye.
El lateral cuenta que es la primera vez que sufre un episodio de este tipo, hecho por el cual quiere alzar la voz. “En el mundo del fútbol tenemos demasiado normalizado que durante los partidos recibamos todo tipo de insultos. Que ocurriese antiguamente no implica que tengamos que seguir soportándolos, e independientemente de los insultos tenemos que pararlos y que el fútbol transmita valores bonitos”, reivindica.
El Frente Rey, peña de animación del equipo quintanareño que se ubica en la tribuna desde donde se emitieron los insultos, emitió un tweet en el que, según ellos, denunciaban a “un jugador que teatraliza todas las jugadas en las que participa y que provoca durante todo el partido tirando besos a la grada”. Nacho Ruiz replica que no se avergüenza de lo que hizo después de soportar barbaridades durante 80 minutos. “La verdad es que estaba harto y no me escondo en absoluto. Sí que creo que ellos no han dado la cara ni se han disculpado”, sentencia el jugador.
