DIPUTACIÓN FERIA DEL LIBRO
Es noticia en Cuenca: Educación Balance Día del Libro 2024 Tauromaquia Accesibilidad Asociación de la Prensa de Cuenca Criminalidad Tráfico Día del Libro investigación
Homenajes

Emotivo recuerdo a Marco Pérez en el camposanto de San Isidro

Con motivo del 35 aniversario de la llegada de los restos del ilustre imaginero a Cuenca
Fotos: C.I.P.
23/02/2020 - Jose Vicente Ávila

Un emotivo y sencillo homenaje de recuerdo al escultor e imaginero Luis Marco Pérez se celebró este domingo 23 de febrero de 2020, al cumplirse el 35 aniversario del traslado de los restos del laureado escultor de Fuentelespino de Moya, en el Camposanto de Personalidades Conquenses de la ermita-cementerio de San Isidro Labrador, sita extramuros del Casco Antiguo, asomada a la Hoz del Júcar.

El acto fue organizado por dos de los miembros que quedan de la Comisión gestora del Traslado de los restos del escultor, fallecido el 17 de febrero de 1983, que se encontraban enterrados en Madrid. La iniciativa de traer a Cuenca los restos partió de la Hermandad de Jesús Nazareno de El Salvador (Jesús de las Seis), para lo cual se formó una comisión integrada por Andrés Villanueva, Luis Benítez Cruz (fallecido recientemente),y Ángel Álvaro y Pedro Romero, que son los dos que quedan, y decidieron tener este recuerdo de llevar a cabo una ofrenda floral tras un responso al cumplirse los 35 años, tras su solicitud al párroco de Santiago y San Pedro y rector de la ermita de San Isidro, Miguel Ángel Albares.

La invitación al acto de recuerdo a Marco Pérez ha tenido una especial acogida por parte de las autoridades de Cuenca, Junta de Cofradías, pueblo nazareno conquense y Hermandad de San Isidro Labrador, encargada de velar por la ermita-cementerio. Al acto asistieron el concejal de Movilidad, Servicios Públicos y Festejos, Adrián Martínez Vicente; Elena Carrasco Valera, vicepresidenta de la Diputación Provincial; Amelia López Ruiz, delegada provincial de Bienestar Social; Jorge Sánchez Albendea, presidente de la Junta de Cofradías de la Semana Santa de Cuenca, representantes de Hermandades nazarenas; el presidente de la Hermandad de San Isidro, Florián Belinchón y José Benedicto, biógrafo de Marco Pérez, también natural de Santa Cruz de Moya, junto a decenas de personas.

Emotivo recuerdo a Marco Pérez en el camposanto de San Isidro

Ángel Álvaro Pérez, acompañado de Pedro Romero, tomó la palabra para informar que los dos componentes que quedan de aquella Comisión querían tener este recuerdo a Marco Pérez después de los 35 años de la llegada de sus restos, citando cómo surgió aquella iniciativa para que el tantas veces premiado escultor reposase en Cuenca. Tuvo un especial recuerdo para los compañeros fallecidos, citando igualmente a las personas que desde sus cargos hicieron posible el traslado y el homenaje a Luis Marco, como la concejala Consuelo Ruipérez; el diputado Mariano Buendía y el delegado de Cultura, Manuel Osuna y los actos celebrados con la misa en la Catedral ante los 19 pasos que esculpió y el traslado de los restos a hombros hasta el cementerio de San Isidro.

Álvaro Pérez resaltó la figura de Marco Pérez, que hizo con su gubia esos “pasos” que definen la Semana Santa conquense, como aquellas estatuas que orlan la ciudad como el Pastor de las Huesas (bajo el puente de San Pablo), el Hombre de la Sierra, Lucas Aguirre o doña Gregoria de la Cuba, en el Parque de San Julián. Marco Pérez descansa en la Cuenca que él modeló, vino a decir, frente al río Júcar que baña el paraje a modo de los versos de Gerardo Diego: “Agua verde, verde, verde / agua encantada del Júcar…”, y ante esa “grieta azul de luna rota” en los versos de García Lorca a la Ciudad Encantada de Cuenca. Líricas palabras para expresar ese lirismo y rotundidad de la obra de Marco Pérez en sus esculturas y en la expresión nazarena de la Semana Santa.

Pedro Romero, que ese año de 1985 ganó el concurso para el cartel de la Semana Santa, dio las gracias a todos por esa presencia en el recuerdo a Marco Pérez. Un escultor al que tuve la suerte de entrevistar en junio de 1975, dejando una de sus mejores frases de amor a su provincia: “Cuenca lo es todo para mí”.

El rector de la ermita de San Isidro, Miguel Ángel Albares, ofició un responso ante la tumba de Marco Pérez, que quedó cubierta de ramos, tras la ofrenda floral. Un acto hermoso y de reconocimiento al escultor imaginero de Fuentelespino de Moya, que comparte su reposo eterno junto a Federico Muelas, Fernando Zóbel, Bonifacio Alfonso Gómez, Miguel Zapata, Florencio Martínez Ruiz y Víctor de la Vega, en este camposanto de personalidades conquenses, que este año cumplirá 40 años de su creación.