Casas de Garcimolina sorprende a la paleontología española con un yacimiento único
El nuevo yacimiento paleontológico de Casas de Garcimolina, en la Serranía conquense, se ha convertido en un referente inesperado para la paleontología española toda vez que, tras una primera excavación en 2024, un equipo de la Universidad autónoma de Madrid, en colaboración con la Asociación de Mujeres del Sabinarejo, haya sacado a la luz casi 400 fósiles.
Estos están aportando información clave sobre los ecosistemas de hace 129 millones de años, durante la llamada revolución terrestre cretácica. Es decir, del momento en el que se configuraron los actuales ecosistemas tal y como los conocemos.
Candela Blanco Moreno y Hugo Martín Abad, paleontólogos y profesores en la Universidad Autónoma de Madrid, han sido dos de los encargados de las primeras excavaciones. “Sabíamos un poco de la existencia del yacimiento por cosas que nos habían contado, pero la localización exacta no la teníamos clara y de ahí que el año pasado fuimos con pocos recursos”, han recordado los paleontólogos, quienes han subrayado que aún así sacaron casi 400 fósiles, “muy bien preservados y algo diferentes a los de Las Hoyas, lo cual nos da información extra sobre cómo era la zona de humedales de la región hace millones de años”.
Los investigadores han encontrado restos de peces, bivalvos, fragmentos de cocodrilos e incluso coprolitos (excrementos fósiles). La diversidad hallada ha superado todas las expectativas iniciales, lo que ha motivado una segunda campaña de excavación este verano que arrancará en las próximas semanas.
“Encontramos una biodiversidad bastante más alta de la que esperábamos, sobre todo de animales, ya que en Las Hoyas, la gran mayoría de lo que hemos encontrado es vegetal”, sostienen los paleontólogos, quienes han dejado claro que la ilusión de este año es encontrar todavía más plantas, peces u otros organismos.
ECOSISTEMA
El yacimiento data de hace 129 millones de años, en pleno Cretácico Inferior, y se relaciona con uno de los eventos más importantes de la historia de la vida: la Revolución Terrestre Cretácica. Este proceso marcó el origen de los ecosistemas modernos, sustituyendo las faunas típicas de la era de los dinosaurios por formas más similares a las actuales.

A diferencia de Las Hoyas, Garcimolina presenta un entorno más dinámico, con aguas rápidas que dificultaban la preservación de plantas, pero favorecían la presencia de bivalvos y peces adaptados a ambientes oxigenados. Entre los hallazgos estrella está un ejemplar completo de pycnodontiforme, un pez mesozoico de cuerpo discoidal y una dura dentadura especializada en triturar conchas.
También se han recuperado abundantes restos de cocodrilo, como dientes y osteodermos, lo que resulta poco habitual en este tipo de depósitos.
EXPOSICIÓN TEMPORAL
Parte de estos hallazgos se muestran desde este viernes 15 de agosto en el Museo Paleontológico de Castilla-La Mancha (MUPA) en una exposición temporal que se va a prolongar durante seis meses.
Titulada ‘Dos ventanas al cretácico inferior: Las Hoyas y Garcimolina’, la muestra reúne tanto fósiles del yacimiento más novedoso, así como restos de Las Hoyas. Entre ellos, está el único fósil de planta con flor que se ha descubierto en todo el mundo, y es de Cuenca.
La muestra, que busca dar a conocer un patrimonio paleontológico excepcional, también recoge una serie de fotografías sobre las excavaciones, que viajará posteriormente a Valencia y otros museos. “Vais a ver plantas, peces teleósteos, el pycnodontiforme, coprolitos y algunos invertebrados como bivalvos y gambitas toda vez que hemos elegido piezas representativas y vistosas, aunque hay más de 400 fósiles en almacén”, han comentado los paleontólogos.