El expediente de regulación de empleo (ERE) en la planta de Mahle en Motilla de Palancar, que se ha saldado con 462 despidos, va a tener un impacto “devastador” en la comarca y en la provincia. Así de contundentes se han mostrado este martes los representantes del sector de Industria de los sindicatos CCOO y UGT, que han exigido a las administraciones un plan urgente de reindustrialización, así como participar activamente en la mesa "que se conforme para atraer nuevos proyectos que amortiguen el ERE".
El secretario general de Industria de CCOO en Castilla-La Mancha, José Antonio Cuevas, ha calificado el expediente de “duro e ingrato” y ha asegurado que el preacuerdo refrendado por la mayoría de la plantilla el pasado 29 de octubre “no puede considerarse satisfactorio” porque los más importante, han dicho, era salvar el mayor número de puestos de trabajo “y Mahle se ha negado”.
Cuevas ha recordado que el expediente ha pasado de un planteamiento inicial de 550 despidos a 462, un “esfuerzo insuficiente por parte de la compañía que deja en la calle a 461 familias en una zona rural que era ejemplo de industrialización”.
Las indemnizaciones y condiciones de los despidos, entre las que destacan el plan de rentas para mayores de 55 años y una bolsa de empleo de tres años que permitiría la reincorporación si la actividad se recuperara, no compensan, a juicio de CCOO, la pérdida de empleos y “el drama por el que están atravesando estas familias”. Según los sindicatos, 311 trabajadores ya han sido despedidos y 152 lo serán en marzo de 2026, “con comunicaciones enviadas por burofax sin ni siquiera dar la cara”.
CRÍTICAS A LA EMPRESA
El representante de UGT FICA en Cuenca, Jesús Laín, ha denunciado la falta total de empatía por parte de la empresa: “Este es el mayor ERE que ha sufrido la provincia de Cuenca y deja a una comarca muy tocada. Ni siquiera se ha tenido consideración con los trabajadores en situación de baja, con reducción de jornada o de maternidad. No ha sido un expediente socialmente justo”.
Laín también ha reprochado a la empresa que las notificaciones del despido hayan llegado a medianoche y ha criticado que “Mahle haya mostrado cero compromisos con la plantilla y con el futuro de Motilla”.
Ambos sindicatos han confirmado que unas 30 personas “presentarán demandas por despido improcedente”, principalmente por la vulneración de derechos de colectivos protegidos.
LLAMAMIENTO A LAS ADMINISTRACIONES
CCOO y UGT han reclamado la implicación inmediata de las administraciones en la búsqueda de nuevos proyectos empresariales que ocupen el espacio dejado por Mahle. “Motilla del Palancar ofrece instalaciones, maquinaria y una plantilla cualificada en el sector eléctrico. Es el lugar ideal para reindustrializar”, ha defendido José Antonio Cuervas, de CCOO.
Los sindicatos han exigido también una investigación sobre las subvenciones públicas recibidas por Mahle, muchas de ellas procedentes de los fondos Next Generation, que llevaban implícita la adquisición de maquinaria para la industrialización de sus productos. “Esas maquinarias están en Motilla, entendemos que tienen que permanecer en Motilla, y lo que no entendemos es que no lleven aparejada una vinculación y una obligación de mantener el empleo en aquellas plantas en las que se hace la inversión”, subrayan.
CCOO y UGT han confirmado que la comisión de seguimiento del ERE ya está constituida y será la encargada de supervisar la aplicación del plan de recolocación y la gestión de la bolsa de empleo. Empresas como Sumitomo, Solán de Cabras o Ayecue Iniesta han solicitado algunos perfiles profesionales “que podrían ser atractivos para el futuro laboral de los trabajadores despedidos”.
Cuevas ha recordado que los despidos supondrán un incremento del 5% en la tasa de paro provincial y ha reiterado que “la prioridad es que Motilla no pierda su condición de referente industrial en el mundo rural”.