Empleo
Cuando escuchamos el discurso que mantienen algunos representantes de la oposición contra los gobiernos central y autonómico nos preguntamos, utilizando términos futbolísticos, qué partido estarán viendo. Desde diferentes tribunas y foros, voceros especialmente de la derecha describen machaconamente una situación del país caótica y apocalíptica que en la mayoría de las ocasiones no se corresponde con la realidad. El mantra más extendido es que hay que sacar a Pedro Sánchez de la Moncloa porque ha pactado con comunistas y con separatistas que quieren romper España.
El asunto se agrava si, como hemos visto ya en numerosas ocasiones, el mensaje negativo se trasmite fuera del país con la intención de desvirtuar una acción de gobierno que no merece ni mucho menos tan nefastos calificativos, acción que ha sido ensalzada incluso por destacados líderes internacionales de diferentes colores. Todo en esta vida es manifiestamente mejorable, pero los representantes políticos, especialmente ellos, deberían reconocer las señales positivas, aunque éstas sean fruto de iniciativas puestas en marcha por formaciones y agrupaciones rivales.
Muchas veces hemos destacado que toda oposición ha de ser constructiva y no permanecer siempre centrada en desgastar injustamente al gobernante sólo con el fin de moverle el sillón para sentar en él a uno de los suyos. En situaciones de crisis como la que vivimos es innoble cargar las tintas contra los gobernantes y acusarles de situaciones que ni han provocado ni tienen posibilidad de solucionar por si solos. Y en este tipo de coyunturas difíciles, cualquier signo de mejora debe ser agradecido y divulgado porque siempre es mejor mantener un clima positivo que un ambiente enrarecido y crispado que genere tensión y desesperanza en una población que lo que menos necesita es caer en el enfrentamiento ideológico.
En este sentido, uno de los indicadores que mejor refleja el estado del país es el del desempleo. Este jueves hemos conocido que el paro ha bajado ya de los 3 millones de personas en España, por primera vez desde 2008. En la región y en la provincia la reducción del mes de abril se sitúa en torno al 4%, y cerca del 25% en términos interanuales. Datos que no se registraban desde hace 14 años.
Las cifras son también espectaculares en cuanto a la contratación indefinida, fruto de una reforma laboral que no fue refrendada por los partidos de la derecha. Desde una óptica objetiva, resulta difícil negar que muchas cosas se están haciendo bien, sobre todo en materia económica y sociolaboral, pero la oposición seguro que está viendo un partido diferente..., por volver a hacer referencia al deporte rey. Sus representantes tratarán de ver la paja en el ojo ajeno y obviarán reconocer que muchas de las medidas puestas en marcha por el Gobierno están funcionando, sobre todo en materia de Empleo y Bienestar Social.
Es evidente que los salarios deben subir porque la inflación golpea con fuerza en todos los sectores, pero no es menos cierto que se ha avanzado mucho y que estos avances no deben ser ignorados por la oposición. Más bien al contrario, debería subirse a la barca común y remar en sintonía con los gobernantes para que se retome un ritmo de crecimiento que permita sortear los escollos que plantea la situación actual.
