"El Círculo"

Si no se hubieran inventado las figuras geométricas, no sabríamos distinguir un triángulo de un cuadrado o de un rombo o…de lo que les voy a referir hoy con dos ejemplos: el círculo.

La ecomía circular. No sé si a ustedes les habrá pasado lo que a mí, cuando

oí hablar la primera vez de economía circular, que supuse, de inmediato, que se trataba de las vueltas que tenían que darle al magín muchas familias para llegar a fin de mes, y resultó que no se traba de eso ni mucho menos, sino que se trata de reducir los residuos al mínimo mediante un proceso de producción y consumo que implica compartir, alquilar, reutilizar, reparar, renovar y reciclar materiales y productos existentes todas las veces que sea posible para crear un valor añadido.

Se trata, en otras palabras, de la ampliación de las cuatro “R” de toda la vida de un consumo responsable para la conservación del medio ambiente, aprovechando el valor residual que pueden tener los materiales al final de su vida útil, al poderse usar una y otra vez, formado un aprovechamiento circular. De ahí su nombre, vamos, digo yo.

El indulto: No voy a referirme en este artículo a los indultos en general, ya que son potestad del gobierno y todos los gobiernos que en España han sido han otorgado esa medida de gracia políticos, banqueros, militares y miembros de bandas armadas, y si en particular al que en estos días está de actualidad al que se puede conceder a los llamados “presos del procés” y lo hago por su condición de circular, ya que partiendo de un punto conocido como es el delito de sedición, pasan por la detención, encarcelación, juicio y condena sucesivamente hasta que les concedan el indulto (si es que se lo conceden) y vuelta a empezar; porque no es ya cuestión solamente de falta de arrepentimiento, sino de perseverancia en su radicalidad.

Como en tantas otras cosas, el tiempo me dará o quitará la razón, pero creo sinceramente que de pasar página, nada de nada.