Bulos, no gracias
A nadie se le escapa que las juntas electorales deben ocuparse no sólo de medir tiempos y palabras de los medios, recibir y tramitar las denuncias de los partidos políticos o de los ciudadanos y proteger la limpieza de los procesos electorales. Además de eso, son muchos quienes piensan que deberían actuar de oficio ante los bulos, las mentiras y los insultos que durante una campaña electoral se vierten en las redes sociales, carteles y rótulos en autocares y furgonetas. Incluso los hay que exigen una intensa vigilancia a lo largo de las legislaturas para evitar los abusos que a menudo se producen y que sonrojan a la gente bien intencionada. Casos como el que han denunciado los socialistas conquenses en referencia a las informaciones vertidas por un supuesto agitador ultraderechista en connivencia con un destacado miembro del PP no deben permitirse y, por supuesto, sus responsables no pueden salir de rositas, máxime cuando son reincidentes en le repugnante actividad de mentir para desprestigiar al adversario. Y aún ahondamos más, quizá las fiscalías deberían también tomar cartas en estos asuntos, porque tales conductas son, sin duda, delictivas y nada tienen que ver con la libertad de expresión. No debe salir gratis tratar de manipular a la opinión pública con burdas mentiras.
Este domingo serán los ciudadanos quienes deben mostrar su buen criterio votando en conciencia a quienes crean conveniente, pero no influenciados por la basura que se vierte muchas veces en redes sociales y en todo tipo de soportes. Los autores de estos desmanes insultan la inteligencia de mucha gente que detecta a la legua la información sucia , pero también se aprovechan de los crédulos que no son capaces de contrastar las informaciones y se tragan todo lo que leen, escuchan o ven. Por eso, desde estas páginas hacemos un llamamiento a la responsabilidad, porque, aunque algunos no lo tengan en cuenta, cada voto es importante y cada papeleta en la urna es una expresión de libertad que durante muchos años este país no pudo disfrutar y que algunas de las formaciones políticas que concurren a estos comicios pretenden conculcar basando sus expectativas en la mentira y el exabrupto.
Al margen de la campaña, este jueves conocíamos una buena noticia para la economía y las posibilidades de empleo de mucha gente en la provincia. El Consejo de Gobierno ha aprobado definitivamente el Plan de Singular Interés que pone en marcha el futuro Parque Tecnológico de Economía Circular que se ubicará en los terrenos de Los Palancares. La Diputación deberá tenerlo listo en un plazo de dos años y medio y supondrá inversiones superiores a los 20 millones de euros.
Se abre así la posibilidad de ampliar de forma exponencial el terreno disponible para la ubicación de empresas, como, por ejemplo, la multinacional que ya gestiona su ubicación en la capital o un centro destinado a la investigación sobre el hidrógeno como fuente de energía. Habrá también otras firmas cuya actividad debe respetar el medioambiente y los procesos productivos sostenibles. Sea cual sea el resultado de las elecciones del domingo, proyectos como el que se promueve en esa zona superan la contienda política y se centran en mejorar la vida de la gente, vote a quien vote. Sea pues bienvenido y deseamos que respete la filosofía protectora del entorno con el que nació hace treinta meses.
