DIPUTACIÓN FERIA DEL LIBRO
Más entrevistas: Rosario Pardo Olivia del Saz Ortega David Ximénez Claudia Molina Jairo Cárcaba José María Albareda Jorge Sánchez Albendea Andoni Sierra Ron Darío Dolz Julián Recuenco

“Tengo muy claro que quiero llegar a Tokio”

El ‘handbiker’ taranconero Luis Miguel García-Marquina se prepara para varios meses de test y carreras para representar a España en los próximos juegos paralímpicos
“Tengo muy claro que quiero llegar a Tokio”
Luis Miguel García-Marquina entrenando en la concentración en Altea. Foto: RFEC
05/09/2020 - Mario Gómez

La irrupción de la pandemia de COVID-19 ha echado por tierra o aplazado muchas de las grandes citas en el calendario deportivo, incluido los Juegos Olímpicos y Paralímpicos que tenían este 2020 la ciudad nipona de Tokio como sede. Un evento que se celebra cada cuatro años y que se presentaba como la primera oportunidad para el ‘handbiker’ taranconero, Luis Miguel García-Marquina, de alcanzar el sueño olímpico.

Un sueño que solo se ha pospuesto hasta 2021, pero que no ha cesado en la preparación de este atleta que a comienzos de agosto se trasladó hasta Altea (Alicante) convocado por la Real Federación Española de Ciclismo adaptado. Una llamada a la preparación y a exigentes test de preparación que supone la primera pedalada en su camino a Tokio 2021.

¿Cómo te encuentras tras esa concentración en Altea, que ha sido el primer encuentro de la selección después de los meses de confinamiento?

Muy bien. Mi rendimiento a nivel personal me ha sorprendido. Cuando entrenas, con todo esto del confinamiento, estas aislado, sin competiciones... es difícil mantener muchas veces esa motivación. No ves que el objetivo esté cerca, pero no bajar la guardia es lo que marca la diferencia. En comparación al resto de mis compañeros, me encuentro al mismo nivel, porque, en general, ha habido un aumento técnico y físico de los ciclistas con respecto al año pasado, pero no me he quedado atrás. Al final, el objetivo de esta concentración era comprobar nuestro estado tras el confinamiento.

Imagino que habría muchas ganas de reencontrarse con compañeros y de exprimir esa sensación de volver a rodar en equipo.

Ha sido algo muy positivo. La Federación Española de Ciclismo ha hecho una concentración con el entorno y el nivel del resto de categorías nacionales, en un sitio donde se preparan ciclistas como Valverde o el equipo sub-23, es un entorno privilegiado y un staff técnico perfecto. Allí hemos podido completar test de potencia, intervalos, etc. para luego volcar esos datos y que el seleccionador y el comité evalúe nuestra evolución. Había que comprobar que la gente ha trabajado durante estos meses de confinamiento pese a la falta de carreras. También hemos tenido charlas técnicas, encaminadas a mejorar aspectos, rendimiento, nutrición, etc. y la aplicación de las nuevas tecnologías han sido una de las materias a tratar. Constatado todo esto, hemos podido salir a rodar en carretera. Todos los días entrenando, algunos incluso con doble sesión. La verdad, ha sido duro, pero tenía muchísimas ganas y estoy deseando repetir este próximo mes de septiembre, donde la intención es hacer un encuentro similar, no sé si en Altea de nuevo o en otra localización, pero las ganas de seguir mejorando y escalar ese peldaño otro poco más son innegociables.

Sí es cierto que, por mucho entrenamiento en cerrado, siempre es importante recuperar esa experiencia de rodar en equipo, ¿verdad?

Sin duda. Además, fíjate que en este caso, varios de los componentes del equipo de la selección participamos en la prueba de ‘team relay’. Es esa sensación de estar con el equipo lo que ha servido para sacar toda la caballería después de tantos meses entrenando. El estar cerca de tus compañeros que son los más fuertes a nivel nacional, hace que te esfuerces un punto más en ese nivel de rendimiento, así como lo emocional de sentirte parte de un grupo.

“Tengo muy claro que quiero llegar a Tokio”

El asunto de la pandemia ha sido algo que ha trastocado por completo los planes para Tokyo, ¿cómo ha sido el readaptarlo todo?

Pues teníamos todo el año preparado, pero claro, cuando llegó el confinamiento piensas en qué hacer, tampoco quería perder toda la preparación en la que tanto había trabajado. Decidimos mantener el programa de actuación y de ahí ver los valores que somos capaces de conseguir tanto en el mes de septiembre y octubre que constanten una evolución al comparar todos los datos, resultados, sensaciones, etc.

¿Cuál será esa nueva hoja de ruta para llegar a los Juegos Paralímpicos de Tokio 2021?

Lo que vamos a hacer es un simulacro de preparación para el mes de octubre, donde, si dios quiere, debería celebrarse tanto el Campeonato de España por un lado, y el Campeonato de Europa en Cáceres. Nos servirá para ver en qué estado de forma llegamos y las opciones. Luego alargaremos un poquito más la temporada para descansar unas tres o cuatro semanas en noviembre y diciembre. Con el nuevo año volveremos a empezar al máximo con la vista puesta en mayo con pruebas como el Campeonato del Mundo en Portugal, y un par de Copas del Mundo que se celebrarán en Italia y Bélgica en las que participará la selección. En ese punto, los resultados y el nivel que tengamos serán un buen indicativo de las posibilidades reales de conseguir algo. No obstante, habrá que llegar en el mejor estado posible a agosto de 2021 a Tokio.

Recuerdo de la última entrevista que me comentaste una frase muy ambiciosa: “Si llego a Tokio, tengo claro que estos no serán ni mis primeros juegos ni los últimos”, ¿es ese factor motivacional lo que le ha permitido seguir trabajando todo este tiempo pese a la noticia del aplazamiento de los juegos?

Yo creo que es lo que marca la diferencia en el rendimiento del ciclista. El mantener ese planteamiento. Podría perfectamente decir ‘como no sé cual es el objetivo al haberse aplazado los juegos, aflojo el pistón, bajo el número de entrenos y me espero a ver qué pasa para volver a empezar. No, porque se pierden esos meses de evolución. Yo creo que si soy capaz de mantener eso, voy a ganar en mi objetivo. Me reafirmo de lo que te dije. No sé si serán los primeros juegos en los que participe, pero tengo claro que no serán los últimos. Tengo claro que quiero llegar a Tokio, y además, haré todo lo que esté en mi mano para ganar. No voy solo a participar o a pasearme, no me conformaría con sólo llegar, sino que trataré de luchar por las medallas sin dudarlo. Y si no es en Tokio, pues lo intentaré en París 2024 o Los Ángeles 2028.

“Tengo muy claro que quiero llegar a Tokio”