“Tengo ganas de que lean mi primer libro y ver qué opinan”

Desde que tiene uso de razón, una de sus aspiraciones ha sido la escritura y, quizá por eso, recaló en el mundo del periodismo, en el que ya lleva 17 años. Sin embargo, esas ansias por escribir le pedían más, hasta el punto de tener como reto la publicación de un libro. Sueño que ha visto hecho realidad, ahora, cuando está a punto de cumplir 39 años.

Jesús Huerta (Cuenca, 1982) acaba de dar el salto al mundo editorial con la publicación de su primer libro ‘El miedo va a cambiar de bar’; una novela “noctámbula y macarra”, en la que da rienda suelta a su narrativa, que tanto tiene que ofrecer, y con la que se saca “esa espinita que tenía clavada desde pequeñito”. 

La presentación tendrá lugar este viernes, 26 de noviembre, a partir de las 20 horas, en la Sala de Préstamo de la Biblioteca Municipal del Centro Cultural Aguirre. 

Ha necesitado entre dos y tres años para ver terminada su ópera prima. Y es que, según reconoce, le ha resultado muy complicado encontrar tiempo para escribir después de dedicarse todo el día a sus labores periodísticas.

Aun así y poco a poco al final ha logrado completarla, gracias, eso sí, al importante empujón que pudo darle durante el confinamiento, que, además, coincidió con el final de una etapa laboral y el inicio de nuevos proyectos.

“En ese momento pude dedicar entre cinco y seis horas diarias a escribir el libro; algo que, por cierto, se nota, incluso, en la parte correspondiente de la novela, que tiene mucho más ritmo”, aclara.

Confiesa que le ha costado bastante escribir los personajes femeninos. Él lo achaca a que “un hombre cuando escribe lo hace con voz de tío”, pero, aun así, piensa que lo ha conseguido, si bien reconoce que le han quedado “un poco rudas”. Algo que, sin embargo, considera que queda difuminado porque “en general, todos los personajes de la novela son muy macarras, gente de la noche”.

Afirma que le ha dado vértigo dar este paso y lanzarse al mundo editorial, sobre todo por lo que puedan opinar los lectores, ya que “soy muy crítico conmigo mismo”. Pero tiene claro que ha merecido la pena, porque dice estar satisfecho con el resultado. Ahora solo falta, según asegura, “lo más importante, la opinión del público”. Dice tener ganas de que lean su libro para, de esta manera, saber su opinión, confiando en haber logrado estar a la altura, aunque haga hincapié en que “no deja de ser mi primera obra”.

‘El miedo va a cambiar de bar’ ofrece un relato de 140 páginas que se desarrolla en una misma noche, en la que sus protagonistas, Ortega y Juan, se van de fiesta en una pequeña ciudad, pasando por tres bares, en los que se van encontrando a personajes de todo tipo, que van enriqueciendo la trama hasta llegar a un final totalmente inesperado. Es una novela, tal y como detalla, que coquetea con el esperpento y recuerda a ‘Luces de Bohemia’ en ese sentido de paseo nocturno y callejero, pero, eso sí, aclara que todo es ficción, salvo una de las anécdotas que es suya y que ha preferido no desvelar para que el lector pueda imaginarse cuál es. 

Una novela fácil de leer, con tan solo tres capítulos y en cada uno de ellos un código QR que conecta al lector con la música que sonaría en los tres bares por los que discurre esta historia, dándole la oportunidad de vivir de una manera más inmersiva esa trama “noctámbula y macarra”. ‘El miedo va a cambiar de bar’ ya se puede conseguir en la web de la editorial Libros Indie y, en breve, en las librerías de la capital.