“Cuenca tiene un montón de músicos y hay una oferta cultural interesante"

Todo empezó en un cumpleaños. Lara Iranzo Ramírez (voz y guitarra) y Eduardo Martínez ‘Chuti’  (batería y percusión variada) coincidieron en el verano de 2014 en una fiesta. Había instrumentos y se pusieron a tocar sin más intención que pasar un buen rato. Pero lo más importante es que entre ellos hubo “conexión” musical así que empezaron a quedar para ensayar, lo que acabaría originando el nacimiento del grupo conquense Zarandea tras sumarse también al proyecto Edu Gea como bajista.             

Este último fue sustituido un año después por Carlos Bueno ‘Grus’, quien se ha ocupado del bajo y de los coros de la formación durante todo este tiempo hasta que esta temporada le tomó el relevo Jesús Álvarez Martínez. “Carlos vive en Madrid y estaba muy liado. Este verano nos han salido muchas actuaciones y no podíamos renunciar”, cuenta la vocalista.

De hecho, asegura que, después de un año y medio “muy duro” en el que todo se paralizó debido a la pandemia, en el periodo estival han tocado “muchísimo, más que nunca”. “Como no había verbenas en las fiestas patronales por la pandemia, los pueblos han organizado al menos conciertos y han llamado a grupos pequeños”, añade, relatando que también les han salido actuaciones de la mano del programa Talía, organizado por la Diputación y por el que han recorrido numerosas poblaciones de la provincia.

Lejos queda ya aquel primer concierto de Zarandea en el pub conquense Vaya Vaya -que “fue un exitazo”, en palabras de Lara- aunque la esencia del grupo sigue siendo la misma, sin grandes ambiciones: “Nuestra intención es simplemente tocar y que nos conozcan en la provincia”.

El repertorio musical de Zarandea sí que se ha ido modificando desde entonces ya que comenzaron haciendo versiones de cantautores -sobre todo de América Latina, entre ellos la cantante Mercedes Sosa- pero el grupo se ha ido ‘convirtiendo’ al indie por el camino y han incluido temas de bandas como, por ejemplo, Vetusta Morla e Izal, también a demanda del propio público.

Por el momento, no se plantean crear sus propios temas. “Es la pregunta del millón”, bromea la vocalista, que añade: “Queremos hacer versiones y llevarlas a nuestro terreno”.

Tras haber tocado en la recién clausurada Feria del Libro ‘Cuenca Lee’, el próximo concierto del grupo está programado para el sábado 20 de noviembre en la capital conquense. La cita será a las 17:00 horas, en el cruce de Carretería con Sánchez Vera, en el marco de la primera edición del Festival Otoño en Cuenca, organizado por la firma Voicce, con la colaboración de la Junta, el Ayuntamiento y la Diputación. Precisamente Zarandea actuó esta semana en la presentación del evento, como pequeña muestra de lo que será esta ambiciosa iniciativa que llevará más de cien actividades de cultura y deporte a las calles del centro de la ciudad.

En este sentido, Lara destaca que están percibiendo últimamente que desde las instituciones se está haciendo una mayor apuesta por la cultura. “Se nota más preocupación. No sé si es como respuesta a la paralización tan grande que ha habido por la Covid-19 pero se está reactivando este ámbito”, celebra.

La vocalista, graduada en Magisterio por Música y con estudios de Clarinete en el Conservatorio, reconoce que es “difícil” vivir de la música aunque en su caso sí se gana la vida impartiendo clases de Guitarra en diferentes entidades. El resto de componentes de la formación también compaginan ocupaciones relacionadas con la música al tiempo que, tanto Jesús como Eduardo forman parte de otros grupos de la escena musical conquense como Medetoné.

Eso sí, reivindica que el público general valore más la música. “La gente no está acostumbrada en Cuenca a pagar una entrada por ver un concierto en un local, aunque sea un precio simbólico de cinco euros. Me parece importante que los conquenses se habitúen. Mi ilusión es que se mueva la música también en el interior”, indica.

De todas formas, alaba el movimiento de la ciudad en este ámbito: “Cuenca tiene un montón de músicos y hay una oferta cultural interesante a pesar de ser una ciudad pequeña”.