Orgulloso por el esfuerzo de sus jugadores. Así se muestra Lidio Jiménez en sus declaraciones post partido tras la ajustada derrota por 27 a 28 ante el BM Torrelavega. Justos de efectivos, con pocas rotaciones y encajando en el último segundo, el Rebi Cuenca compitió hasta el final.
El entrenador conquense le traslada las felicitaciones a sus jugadores por el esfuerzo realizado, apreciando que los pequeños errores en defensa de la primera mitad han sido corregidos en una segunda de mucho mérito. “El partido estaba trabajado a falta de cuatro o cinco minutos, pero hemos jugado muy mal y nos ha costado el partido”, lamenta el entrenador, quien señala que han llegado muy cansados físicamente a ese tramo. “El equipo merecía algún punto más, no merecía perder”, expresa el entrenador, quien se muestra “contento con la forma” dado que ha visto en la pista todo lo que le pide a sus jugadores: “Matarnos a defender y trabajar”. Aunque lamenta la “cara de tontos” que se queda tras este amargo final, asegura que “esta es la línea a seguir y compitiendo como hoy, el equipo ganará muchos partidos”.
Espera que este partido “sirva de aprendizaje” de lo que es una ASOBAL en la que cada error se penaliza, y también desea que les acerque a su mejor versión, ya que todavía están trabajando en ella.
Cabe recordar que el equipo apenas ha podido rotar en la segunda mitad debido a un par de lesiones y la dificultad del pivote, ya que Diego Gandara no ha podido jugar al estar cedido por Torrelavega. No obstante, valora positivamente las actuaciones de los debutantes Manuel Lima y Afonso Mendes, este último algo tocado debido a un esguince de tobillo que no le ha permitido estar al 100%.
También recalca el partido de Perbela -12 goles-, a quien tan solo le ha faltado el acierto en los últimos balones, lo cual no mancha su buena actuación. “Ha tomado una decisión y no estaba bien jugada, pero si mete es un partido perfecto. Un gol arriba o abajo no puede variar el gran partido que hemos hecho hoy”, asegura, señalando que el cansancio le ha hecho precipitarse y que, controlando esos momentos, “va a ser un jugador muy a tener en cuenta”.
