El recinto ferial de Cuenca empieza a tomar forma

El ambiente festivo comienza a sentirse en Cuenca con el inicio de los trabajos de montaje del recinto ferial, que abrirá sus puertas del 22 de agosto al 1 de septiembre. Desde estos días ya se ve cómo empieza a tomar forma con la instalación de las primeras atracciones y puestos. Entre los pioneros se encuentran unos coches de choque infantiles y una churrería, que inauguran la cuenta atrás para unas fiestas que prometen ser memorables.

Este año, como ha indicado el concejal de Festejos, Alberto Castellano, el espacio ferial contará con 150 puestos repartidos entre atracciones, tómbolas y zonas de restauración, de las que 80 estarán dentro y el resto en las calles aledañas, convirtiéndose en uno de los puntos neurálgicos de las celebraciones en honor a San Julián.

A ellos se sumarán dos grandes novedades que, seguro, despertarán la curiosidad y la adrenalina de los visitantes: una atracción de troncos acuáticos y una montaña rusa, que se estrenarán en esta edición y que irán ubicadas al final del recinto ferial, ya que ha sido la única zona en la que se ha podido hacer espacio para ambas instalaciones.

Pero la diversión no se quedará solo en las atracciones. Anexo al recinto, la Carpa Joven volverá a convertirse en el epicentro musical, con un cartel que incluye a 45 grupos locales, reflejo del talento conquense. Además, el Bosque de Acero será el escenario perfecto para una concentración de foodtrucks, todas ellas procedentes de la provincia, ofreciendo una variada oferta gastronómica sobre ruedas.

Con estos ingredientes, la feria de Cuenca se prepara para recibir a miles de visitantes en un ambiente de alegría, tradición y modernidad. Y mientras tanto, las primeras luces y sonidos empiezan a encenderse, anunciando que el corte de cinta por parte de la Corte de Honor está cada vez más cerca.