La obra principal del cementerio nuclear comenzará en 6 meses

La obra principal del Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos nucleares que el Gobierno de España construirá en la localidad conquense de Villar de Cañas comenzará en el plazo de seis meses. El presidente de ENRESA, Francisco Gil-Ortega, que este jueves asistía a la inauguración del acondicionamiento del camino de Casalonga, asegura que ese momento será “una verdadera revolución” para Villar de Cañas, puesto que la obra principal tendrá un presupuesto de 218 millones de euros. 

El proyecto del cementerio nuclear va a suponer una inversión cercana a los mil millones de euros, incluyendo la mejora de caminos y carreteras, o la construcción del Vivero de Empresas aparejado al silo. Algo que “nunca hubiese pensado ni el alcalde de Villar de Cañas, ni los vecinos”, señalaba Gil-Ortega, gracias “al Gobierno de España y a la presidenta Cospedal”.

“ENRESA ha venido aquí para quedarse”, apostillaba su presidente, convencido de que esta actuación servirá para aumentar el nivel socio-económico de esta comarca conquense. 

El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Jesús Labrador, felicitaba al presidente de ENRESA por apoyar un proyecto “que muchos pensaban que era un sueño o que no se iba a realizar”. Considera que “se ha demostrado que Villar de Cañas es una buena apuesta de Cospedal y Rajoy” para crear riqueza y empleo.

El acondicionamiento del camino de Casalonga, que une Villar de Cañas con la A-3 pasando por la urbanización de este nombre, es el primer proyecto de mejora de infraestructuras para esta zona asociado a la construcción del cementerio nuclear. Para el presidente de la Diputación de Cuenca, Benjamín Prieto, se trata de una infraestructura “largamente demandada” en la comarca, que beneficiará no sólo los habitantes de Villar de Cañas o de Casalonga, sino también a los de localidades próximas como Montalbanejo, Alconchel de la Estrella, Zafra de Záncara o Fuentelespino de Haro. 

Con una inversión de 800.000 euros, se ha actuado en un tramo de 10 kilómetros en los que se ha rehabilitado y reforzado el firme, se ha mejorado el drenaje transversal y horizontal, se han actualizado las señalizaciones y se han pintado las marcas viales. Además, se ha mejorado la seguridad con bandas de alerta en los tramos más peligrosos, nuevas balizas y sistemas de contención de vehículos en las curvas, así como el refuerzo y rehabilitación de tres pasos sobre cauces, en los que además se han instalado nuevos pretiles homologados y barreras de seguridad. 

Las obras han sido ejecutadas por la empresa Construcciones Sarrión, adjudicataria en el proceso de contratación realizado por la Diputación Provincial, en virtud de un convenio de colaboración suscrito con ENRESA para acometer obras de mejora de infraestructuras para la instalación del silo nuclear.