El coste de exposición del artista disidente chino Ai Weiwei en la Catedral rondaría los 1,4 millones de euros

Un total de 1,4 millones de euros. Es lo que costaría la exposición ‘La poética de la libertad’ del artista disidente chino Ai Weiwei que el Gobierno regional, en colaboración con sus organizadores, la empresa Art-Eulen, y el Obispado de Cuenca trabaja para que el próximo verano, en concreto en los meses de junio, julio y agosto, pueda acoger la Catedral coincidiendo con la celebración del XX Aniversario de Cuenca como Ciudad Patrimonio de la Humanidad.

Es la información que ha dado el alcalde de Cuenca, Ángel Mariscal, en el transcurso del pleno ordinario celebrado esta mañana en el Ayuntamiento de la capital, en concreto durante una moción del Grupo Municipal Socialista que abogaba por suscribir una declaración institucional de apoyo a los refugiados y a Ai Weiwei, que recientemente retiró dos exposiciones de Dinamarca en protesta por la decisión de este país de confiscar sus bienes a los solicitantes de asilo.

Las previsiones, dado el carácter mediático de Ai Weiwei, apuntan, según el alcalde, a que la muestra podría ser vista por entre 200.000 y 300.000 visitantes.

También, señala que la exposición requiere de una serie de obras en la Catedral para cuestiones como la mejora de su iluminación valoradas en 250.000 euros que según ha dado a entender ya han sido aprobadas por el Consorcio Ciudad de Cuenca.

Aunque Mariscal ha expresado su deseo de que “ojalá se lleve a cabo”, ha mostrado sus reticencias al advertir de que la muestra supone “mucho dinero” y “es poco viable si no hay ya patrocinio”, pues la última información difundida por la Junta de Comunidades apuntaba a que todavía se estaba trabajando en la búsqueda de financiación.

A esto une su opinión de que, si se quiere atraer visitantes con una muestra de este calado, “lo importante es anunciarlo con antelación”, pero ya faltan menos de cuatro meses para el mes de junio.

El primer edil ha revelado asimismo que en un principio se barajó que la exposición pudiera verse en Cuenca durante ocho meses, pero entonces el presupuesto se disparaba por encima de los dos millones de euros.

Según el alcalde, esta exposición no estaría encuadrada en los actos del XX Aniversario, sino en la del Cuarto Centenario de la publicación de la segunda parte de ‘El Quijote’, para cuya organización se creó el pasado año una Comisión Nacional de cuyo pleno forman parte, entre otros, el Gobierno regional, a través de varios ministerios, las Comunidades Autónomas de Cataluña, Andalucía, Aragón, Madrid, Castilla y León y Castilla-La Mancha, el Ayuntamiento de Alcalá de Henares, la Biblioteca Nacional de España, el Museo Nacional del Prado, la Real Academia Española, el Instituto Cervantes y Acción Cultural Española (AC/E).

Moción del GMS

La información sobre esta exposición ha trascendido en el transcurso un largo debate que ha acabado con la aprobación de una moción de solidaridad con los refugiados y al artista Ai Weiwei gracias a los votos de PSOE, IU y Ciudadanos, mientras que el PP ha votado en contra.

Ante las críticas del resto de partidos el Grupo Municipal Socialista ha dado, eso sí, marcha atrás a un punto de la moción en el que se abogaba por informar a la ciudadanía de la posibilidad de realizar donaciones (las cuales conllevarían deducciones en el IRPF) para sufragar los gastos de esta muestra.

Tanto Ciudadanos como IU habían advertido de que con este añadido la moción quedaba “confusa”. IU consideraba además que al hablarse de donaciones y hacer referencia al XX Aniversario quedaba “desvirtuada” la “sensibilidad” ante el “drama” de los refugiados y la defensa de los derechos humanos.

El PP justificó su rechazo a través de la concejal de Cultura, Marta Segarra, que también consideró “inapropiado y confuso” que en un primer momento se hablara de “refugiados, una tragedia que nos sensibiliza a todos, y la financiación de una exposición", preguntándose si lo que se buscaba es que la muestra fuera pagada por los ciudadanos. Este partido se mantuvo en su rechazo pese a los cambios introducidos finalmente en la moción.