El Paseo del Huécar se ha convertido este fin de semana en el lugar idóneo para viajar en el tiempo hasta la Edad Media y toparse con diferentes culturas a través de los sentidos.
Desde la Puerta de Valencia hasta el Teatro Auditorio, medio centenar de puestos ambientados para la ocasión ofrecen a los conquenses y visitantes todo tipo de manjares exquisitos para deleitar el paladar, artesanía variada para decorar y vestir, y varios espacios dedicados a la música y el espectáculo con el objetivo de amenizar la visita a todo tipo de público.
Durante el paseo se pueden adquirir jabones, plantas, perfumes, especias o inciensos, y si el hambre aprieta no hay más que sentarse en los lugares destinados a la restauración para probar el chorizo, las costillas o el asado.
En el Mercado Medieval de Cuenca es posible encontrar de todo hasta este domingo por la noche, momento en el que el viaje mágico al medievo cerrará sus puertas.