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"He tenido una suerte tremenda al poder entrenar a grandes atletas"

Deportista nato, este profesor de Educación Física también ejerce como preparador de atletas de competición
"He tenido una suerte tremenda al poder entrenar a grandes atletas"
Foto: Mario Gómez
28/08/2020 - Mario Gómez

Alberto Fernández es una de esas personas que aman y promueven la práctica del deporte, pero que además generan un valor añadido por su ambición por formar y preparar a otros deportistas. “La verdad es que me viene desde pequeño, sí es cierto que mi formación como licenciado en Educación Física o el máster en Alto Rendimiento va en la línea de esta pasión por el entrenamiento, pero a edad temprana comencé a encargarme de la preparación sobre todo de gente cercana”.

El extinto club de atletismo ‘Casas Colgadas’ fue donde comenzó esta labor con nombres como Israel Fernández, Daniel Torrecilla o el grupo cadete femenino con Paula Valera, Mª Eugenia y Zoraida, quienes consiguieron el primer podio conquense en un campeonato de España.

Con el paso de los años ha sido el complemento de la actividad de deportistas como Mario Llorens (corredor de montaña con amplio palmarés en Campeonatos de España de Trail y Carreras de Montaña), su pareja, Sonia Plaza (fondista internacional por España y participante en pruebas de atletismo internacionales) o el atleta conquense Sergio Mena, que gracias a sus grandes resultados en pruebas de fondo y campo a través estuvo siempre en la órbita de la selección nacional, para continuar su formación en Estados Unidos, donde reside actualmente. “La verdad es que trabajo con deportistas tanto de MTB como de atletismo, pero sí tengo especial devoción por las pruebas de fondo”, admite Fernández.

"He tenido una suerte tremenda al poder entrenar a grandes atletas"

Con el avance de la tecnología, la preparación de los atletas cada vez se cuida más al detalle, pero no por eso para este conquense deja de ser “un proceso de aprendizaje, de desarrollo físico y personal donde uno tiene que tener en cuenta sus capacidades, exigencias y objetivos”, explica Alberto.

“Estos elementos son la base de tu método o tus reglas. Yo he tenido y tengo la suerte de que la mayoría de atletas que preparo son de un círculo cercano, son grandes personas, pero normalmente cuando ocurre esto, se estudia el caso, se plantean unos objetivos realistas, se estudia la experiencia deportiva y con estos ingredientes formamos estos principios y reglas sobre las que guiar todo el proceso de preparación”.

Un camino que no es ni mucho menos un camino de rosas, pues la relación entrenador-deportista “es algo donde se gestionan muchas emociones. Hay días donde el deportista no se encuentra o se le crean dudas sobre lo que está haciendo, se cometen errores, porque esto no es algo matemático o lineal sino bidireccional”, explica Fernández que lamenta que muchas veces “no se llega a conocer todo lo que hay detrás, o que el éxito del resultado se resuma en si se consigue o no una medalla”, dice.

“A mí lo que más me llena como preparador es esa evolución, que el atleta interpreta y se interesa en su esfuerzo y eso le conlleva a crecer deportivamente. Luego puede ocurrir que en un campeonato o en esa prueba uno pueda tener un mal día o el azar le juegue una mala pasada, pero no podemos quedarnos en el ‘blanco o negro’ como barómetro.

CUENCA Y EL DEPORTE

En esta línea, no podemos evitar preguntar sobre el punto de vista de la situación del deporte en la ciudad y la provincia, a lo que Fernández contesta de manera rotunda. “El potencial humano está en todos los sitios y Cuenca no es ninguna excepción, pero sí veo que es necesario un mayor apoyo social del entorno para que tanto los deportistas como el deporte se desarrollen. Es necesario crear una tradición deportiva y no cargarnos las ilusiones y la ambición de un atleta diciéndole ‘con eso no te vas a ganar la vida’ porque estamos cerrando la puerta al talento sin dar esa oportunidad”.