El Sargal se ha convertido en una fiesta en la victoria del Rebi BM Cuenca ante el EON Alicante (32-27). Aunque con grandes nombres a destacar, sería injusto no decir que esta ha sido una victoria coral de un equipo que se ha mostrado a un gran nivel en todas sus líneas a pesar de las adversidades que atraviesa en el plano físico.
Abría la veda Fede Pizarro para que el Rebi Cuenca tomase la delantera, si bien el cuadro alicantino se ponía a la par rápidamente. En términos bastante igualados se disputaban estos primeros minutos en los que el equipo verde desplegaba un buen juego, con un especialmente activo Fede, así como Manuel Lima.
Aunque había una figura que se iba a adueñar del partido poco a poco: la de Pedro Tonicher. El muro luso empezó a tomar protagonismo con varias paradas que predecían el acierto de sus compañeros, circunstancia por la cual pudo tomar una ligera ventaja el equipo de Lidio Jiménez.
Gándara aprovechaba desde 6 metros y su compañero Tavares, con un cañonazo marca de la casa, como acostumbra, seguía el buen ritmo. Buen ritmo pero tanteo bajo, ya que es así como el Rebi Cuenca se está sintiendo cómodo esta temporada: creciendo desde la defensa y sin convertir los partidos en un ida y vuelta que en poco o nada les podría beneficiar.
Con el 9-7 en el luminoso, había una diferencia clara: una solo parada de Domenech, mientras que Pedro Tonicher tenía un 41% de acierto en sus intervenciones. Supo gestionar bien el resultado el equipo conquense para marcharse arriba 11-8 –fantástico trabajo en defensa el que evidencia ese resultado- al descanso.
Les tocó sufrir, eso sí, tras el paso por vestuarios: cambio de portería en el equipo visitante y Hugo Mora empezó a tocar balón, ayudado también por los fallos de los conquenses en algunas acciones con poca fortuna que se topaban con el palo. Así, el cuadro alicantino consumó la remontada (11-12) en unos cinco minutos grises del Rebi, que finalmente se desquitaba con un tanto de Fede.
Se concienció el equipo de Lidio Jiménez, que se convirtió en un torbellino: Nacho, por partida doble, y Toth, anotaban tres goles en cuestión de minuto y medio para cambiar la tónica (16-13), siendo ahora el equipo conquense el que llevaba la batuta.
Aumentaba la renta a cuatro el equipo conquense con una acción de jugón de Manuel Lima, que engañaba a su par con una finta y amago de pase para luego girarse y enfilar con un disparo que significaba el 19-15 con el que el choque se iba a tiempo muerto.
No se le descontrolaba el partido al Rebi Cuenca, que empezaría a hacer más daño cuando Alicante se veía obligado a sacar portero jugador: Antúnez, a placer, anotaba a puerta vacía tranquilamente para aumentar la renta hasta los cinco goles, y momentos después era Toth quien se la jugaba desde campo propio para el 26-20 que precedía a otro tiempo muerto.
A falta de siete minutos, el pescado estaba prácticamente vendido y había ganas de fiesta: Dani Arguillas, que ha pasado momentos duros alejados de la pista por lesión, volvía entre aplausos para generar otros cuantos más. Detuvo un siete metros y El Sargal estalló para celebrar la vuelta del portero, que también se desquitaba con rabia.
Más de Manuel Lima, quien también se estaba gustando sobre el 40x20. El portugués no daba puntada sin hilo ni ataque sin gol, y compañeros como Toth, Fede o Gándara se unían al festín. 32-27 era el resultado final tras un partido fantástico en líneas generales.
Dos puntos que son más que dos puntos: el Rebi Cuenca recupera la confianza y continúa las buenas sensaciones que está dejando esta temporada. Despidiéndose entre un “orgullosos de nuestros jugadores” coreado por El Sargal, los verdes piensan ahora en su compromiso de la próxima semana, que les llevará a medirse a Ademar León.