Oportunidades que cambian vidas

Cerca de 1.400 personas en situación de vulnerabilidad han mejorado su empleabilidad en la provincia de Cuenca y 655 han encontrado trabajo después de participar en el Plan de Empleo que en los últimos cautro años ha desarrollado Cruz Roja- Cuenca en el marco del Programa Operativo de Inclusión Social y Economía Social (POISES) que comienza ya un nuevo periodo con nuevos retos en el horizonte 2020-2023.

Jóvenes, parados de larga duración, mayores de 45 años, migrantes o mujeres en dificultad social, sin estudios y escasa cualificación profesional, han encontrado, de la mano de Cruz Roja y de las empresas colaboradoras con esta iniciativa, cofinanciada por el Fondo Social Europeo y el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, una oportunidad que les ha cambiado la vida.

“La falta de recursos siempre genera conflictos en las familias. Un empleo estable aporta seguridad. Te hace sentir más realizada y más útil", dice Nancy Rodríguez, una mujer de 34 años, con dos hijos de 15 y 3 años, que hace cuatro vino de Perú en busca de una nueva vida junto a su novio español. Durante los dos primeros años solo pudo encontrar algún trabajo eventual de muy corta duración.

Tras su paso por el circuito de formación y cualificación profesional de Cruz Roja, hace dos ya que trabaja como charcutera en uno de los supermercados Día de la capital provincial. Un empleo que le ha permitido mejorar su situación económica, personal,familiar y social.

“En Cruz Roja no solo nos forman para un empleo, nos facilitan las prácticas en empresas y nos ayudan a encontrar un empleo acorde con nuestras necesidades”, dice Nancy, al tiempo que destaca la importancia que a nivel personal supone contactar con personas que están en la misma situación. “Al final todos nos ayudamos y, sobre todo, somos amigos. Que en situaciones como la mía que cuando llegué no conocía a nadie, es muy importante”.

Como Nancy cientos de personas en la provincia han podido dar un giro a sus vidas con su participación en las acciones formativas para el empleo que, de forma gratuita, realiza Cruz Roja y que “están dando muy buenos resultados tanto a nivel nacional como en Cuenca”, destacaba este jueves el director provincial de Cruz Roja, Pedro Roca, durante el desayuno que mantenía con los medios para presentar las nuevas líneas de trabajo del próximo periodo del POISES.

El porcentaje de inserción laboral crece año tras año. Desde que en 2002 Cruz Roja Cuenca comenzara con la puesta en marcha de los programas para mejorar la empleabilidad se ha pasado de menos del 30 por ciento a una tasa de inserción del 51por ciento en sus oficinas territoriales de Cuenca, Tarancón y Motilla del Palancar donde desarrolla programas de empleo, en los que participan más de 16 personas técnicas y voluntarias.

“Los recursos humanos, económicos y materiales que se han puesto al servicio de las personas, son una inversión social altamente rentable, con un retorno de 1,40 euros por cada euro invertido”, señalan desde Cruz Roja.

Junto a la inserción laboral, la mejora de la empleabilidad es un factor fundamentan en los programas que se imparten en Cruz Roja. De hecho, según apuntaba la coordinadora del Plan de Empleo, Eva Nuño, de las 1.400 personas que se han atendido desde 2016, 1.000 han mejorado su cualificación profesional, permitiendo de esta forma ampliar las posibilidades de mejora en el mundo laboral. Además son muchos los que han retomado los estudios.

Según los datos que este jueves aportaba la entidad humanitaria el 61% de las personas atendidas no tiene estudios o solo posee el título de educación secundaria obligatoria y el 26% tiene más de 45 años. Del total de participantes, una de cada dos personas está en desempleo y el 32% es población inactiva, lo que hace aún más difícil su camino hacia el empleo.

De ahí que el trabajo que desarrollan los técnicos de empleo de Cruz Roja en y la colaboración de las empresas que participan en el proceso de formación en prácticas sea “fundamental para darnos una nueva oportunidad”, incide Nancy, quien destaca que en muchos casos estas mismas empresas absorben el personal que se ha formado con ellos después de adquirir las competencias necesarias en Cruz Roja.

El Plan de Empleo de Cruz Roja ha colaborado con 620 empresas en la provincia desde 2016 hasta 2019

Desde 2016, el Plan de Empleo de Cruz Roja ha colaborado con 620 empresas en la provincia, y se han llevado a cabo un total de 2.027 alianzas. En total “282 empresas diferentes han confiado en Cruz Roja a la hora de incorporar nuevo personal o han colaborado en la formación práctica de 379 personas”, en ocupaciones como mozo de almacén, conductor de carretillas, caja, reposición, peón de despiece o gestor de pedidos,entre otras.

Pero son muchos los sectores en los que los usuarios de estos programas han encontrado una oportunidad para mejorar su situación.

Por ejemplo, Juan Manuel Fernández, 55 años, ha conseguido uno de los 1.665 contratos que se firmaron en el anterior Plan de Empleo. "Para mí ha supuesto la oportunidad de reciclarme y poder volver a trabajar en el sector de la construcción al contar con la capacitación que este sector está exigiendo”.

Por su parte Estela Blanco Bailón, una joven de 24 años, a la que la falta de experiencia laboral le dificultaba su acceso al mercado, la capacitación como dependienta realizando prácticas no laborales en Sprinter fue decisivo para conseguir trabajar en la tienda del Centro Comercial El Mirador”.

En otros casos, como el de Adrián Martínez, 23 años, desde que hace dos años realizó un curso de formación como socorrista en Cruz Roja ha tenido trabajo en las temporadas de verano, lo que le ha permitido contar con autonomía económica para continuar con sus estudios. En la actualidad cursa el Ciclo Formativo de Grado Medio ‘Emergencias y Protección Civil’ el IES Fernándo Zóbel de la capital, estudios que le capacitan para desempeñar profesiones como el de bombero, que según cuenta es su ilusión desde pequeño.

“Este año, por ejemplo, lo que he ganado trabajando de socorrista me viene muy bien para sacarme el carné de camión que me piden para bombero”,dice.

Haber desempeñado la labor de socorrista, en este caso le da también puntos en las oposiciones para entrar a formar parte del Cuerpo de Bomberos, que es lo que hará una vez que concluya los estudios.

Antes de participar en los cursos de formación de Cruz Roja, donde llegó tras conocer por su profesora de socorrismo _entonces estaba realizando un Ciclo formativo de Grado Superior de Actividades Técnicas y Deportivas_ que se ofrecían cursos gratuitos en esta materia, Adrián no había tenido la oportunidad de poder trabajar.

“Lo intenté en varios sectores pero la falta de experiencia era una traba y no lo conseguí”. Ahora las cosas han cambiado para él, después de las prácticas durante los dos últimos años, en la temporada de verano, ha trabajado para la misma empresa. Este cambio de condición asegura que no solo le ha permitido disfrutar de una mayor independencia sino que “me ha dado fuerza para seguir adelante para conseguir mi meta”.

Por ello recomienda a las personas que por alguna razón tengan dificultades para encontrar un empleo a que participen en las acciones formativas que desarrolla Cruz Roja.

Ahora comienza un nuevo periodo que con el lema Oportunidades que cambian vidas, pondrá especial esfuerzo en romper la brecha digital y adaptar las capacitación de los usuarios a las nuevas necesidades del mercado laboral.