El Ayuntamiento de Cuenca ha comunicado que las nuevas escaleras proyectadas entre la calle María Luisa Vallejo con la avenida Castilla-La Mancha incluirán una rampa en zigzag para favorecer la movilidad, tal y como ha avanzado la concejal de Urbanismo, Charo Rodríguez, todo ello aprovechando las obras vinculadas a la red de calor que se están ejecutando en la zona.
La actuación es objeto de críticas por parte del Grupo Popular tras indicar que la obra lleva más de dos meses sin avances visibles y presenta una situación “denunciable”. En su ruego, el grupo liderado por Bea Jiménez ha solicitado que se requiera a la empresa responsable el adecentamiento del entorno, la adopción de medidas de seguridad y la agilización de los trabajos.
En su respuesta, Charo Rodríguez ha explicado que, tras una intervención previa de la empresa REBI en el marco de la red de calor, fueron los propios vecinos quienes pidieron sustituir la solución inicial por una alternativa más accesible. El área de Urbanismo ha dicho que estudió la viabilidad técnica y descartó una rampa única debido a la pendiente existente entre ambas calles.
Finalmente, el Ayuntamiento ha comunicado que la solución elegida contempla escaleras combinadas con tres rampas en zigzag, que permitirán salvar el desnivel y garantizar una conexión accesible entre María Luisa Vallejo y la avenida Castilla-La Mancha.
El consistorio ha añadido que REBI ejecutará la obra y asumirá su coste, y que el retraso se debe a la elaboración del proyecto técnico, que se encuentra “terminándose”.
El equipo de Gobierno ha defendido que, una vez concluida, la actuación supondrá una mejora relevante de la accesibilidad y de la conexión peatonal entre ambos viales.
