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Cuenca

Cuenca pierde autónomos y no encuentra emprendedores

La falta de relevos y la despoblación son algunas de las causas
Cuenca pierde autónomos y no encuentra emprendedores
Panadería Hnos González. Foto: Saúl García
30/07/2019 - Adrián G.Quintana

Jornadas laborales de más de nueve horas, sin mes de vacaciones al año y con la conciliación laboral-familiar aún lejos de ser una opción. Así es como se sienten los autónomos manchegos según el último informe de la ATA (Asociación de Trabajadores Autónomos). Unas dificultades que están haciendo mella en Cuenca, donde en lo que va de año se contabilizan 336 menos autónomos en toda la provincia, como informa CEOE Cepyme en Cuenca.

La cifra es alarmante, puesto que, por primera vez desde 2013, la cifra de autónomos en la provincia ha bajado de 19.000, algo que también viene marcado por la falta de emprendedores que releven a los autónomos más longevos. Tan solo en el mes de enero, se perdieron 217 trabajadores independientes, 150 más que el pasado 2018 en ese mismo mes.

Desde la Asociación Intersectorial de Autónomos de la Provincia (CEAT) de Cuenca y la Asociación de Trabajadores Autónomos (ATA) coinciden en que este hecho se debe a la suma de factores como la despoblación, que asola la provincia conquense, o la caída de sectores como la agricultura y la ganaderia, pilares económicos de la región manchega. Desde ambas asociaciones luchan por revertir la situación del autónomo.

CEAT Cuenca y ATA luchan por revertir la situación

José Luis Perea, vicepresidente nacional de ATA, comenta que “Cuenca es la provincia que peores datos da. En los últimos 3-4 años, lleva una regresión de los autónomos importante”, algo que confirma Luis Miguel Garvi, vicepresidente de CEAT Cuenca, quien advierte de que las causas son diversas: “Los cambios normativos, el incremento constante de obligaciones administrativas, complejidad en la puesta en marcha o la repercusión a nivel demográfico”. En este sentido, el sector servicios es el más perjudicado en la provincia, algo que explica Luis Miguel Garvi debido a que “falta población y no se genera economía para darles servicios”.

Por otro lado, las responsabilidades del autónomo llevan a este sector a no perder “jornadas de trabajo por una gripe, solo por asuntos graves”, a lo que José Luis Perea añade que: “la mayoría cotiza por cuotas más bajas, lo que deja unas prestaciones mínimas”. La falta de bajas por enfermedad entre los autónomos, la falta de horarios fijos y la subida de impuestos son algunas de las dificultades económicas que manifiestan. Luis Miguel Garví afirma que estas complicaciones “parten desde el principio, ya que hay que gestionar un importante cúmulo de obligaciones que consiguen crear un temor de entrada”. Admite que existen ayudas, pero defiende que “sería mucho más deseable una centralización de estas en un solo documento, que realmente ayude al autónomo”.

Cuenca pierde autónomos y no encuentra emprendedores

La gran misión para los autónomos es establecer una conciliación laboral y personal. José Luis Perea, a través del último informe de ATA, comenta que “el 19% de autónomos trabaja todos los días y muchos de ellos para resolver temas de papeleo administrativo”, argumentando que “la conciliación es más complicada cuando somos jóvenes, porque el negocio requiere más tiempo y en esa etapa tenemos hijos y cargas familiares”.

Desde CEAT Cuenca, Luis Miguel Garvi defiende que las medidas para combatir esta situación “deben partir de decisiones políticas, de actuaciones de orden general y también de carácter concreto”. Mientras que Perea propone para lograr la conciliación “favorecer la contratación de trabajadores con ayudas que lo permitan”. A pesar de ello, ambos tienen claro que el autónomo nunca va a dejar de estar pendiente de su trabajo “aunque esté con su hijo o esté enfermo, porque se juega su pan. Pero tenemos que facilitarle la vida”, resume José Luis Perea.

El anuncio de Emiliano García Page de poner en marcha la Dirección General de Trabajo Autónomo, muestra la situación que atraviesa la región en cuanto a trabajo autónomo se refiere. Luis Miguel Garvi ve con buenos ojos esta nueva medida, aunque pide que “las políticas sean rápidas, eficaces y generen confianza”. José Luis Perea, por su parte, entiende que “es buena solución, aunque debería haberse puesto en marcha mucho antes. Lo que nos interesa es que tenga competencias y presupuesto”.

Esmeralda: "Siete años de empleada y tres de autónoma. No lo cambio" Cuenca pierde autónomos y no encuentra emprendedores

Según la ATA, la situación actual para el emprendedor es la más ventajosa de los últimos 40 años. Tarifa plana, subvenciones económicas para infraestructuras y ayudas administrativas para poner en marcha un negocio propio y enfocar todos los esfuerzos en lo importante: sacarlo adelante.

Sin ninguna relación familiar que incitara a su puesta en marcha como autónoma, Esmeralda solo necesitó las ganas de autoemplearse: “No tengo ningún familiar que haya sido autónomo, he sido la primera. Mi familia al principio tenía miedo, porque es un riesgo”, afirma. Tras tres años al frente de su Salón de Belleza, está contenta con su decisión y se siente asentada en el negocio con vistas al futuro: “Yo volvería a meterme como autónoma. No te digo que esté toda la vida, pero hoy por hoy yo quiero esto”, sentencia la peluquera que ha visto en el trabajo propio una manera de crecer laboralmente.

Aunque con buenas sensaciones, Esmeralda confirma los datos aportados por el último informe de la ATA: “normalmente trabajo 9 horas y hay algunos días que echo 11 horas, comiendo aquí y sin salir hasta el cierre. No tengo un horario fijo como tal y solo descanso el domingo, que no abrimos”.

Por otro lado, Esmeralda dice que no tiene trabajo de papeleo ni temas administrativos, puesto a que desde que comenzó su andadura como autónoma, decidió encargarle esa labor a la CEOE Cepyme de Cuenca. Una liberación de trabajo aunque al salir de la peluquería, no desconecta de su oficio: “Aunque termine aquí, fuera tengo más cosas en la cabeza. Coger citas por el móvil, hacer pedidos…etc”, comenta Esmeralda, a la que la conciliación laboral también le supone un problema: “¿Conciliación laboral? Es fácil; si te quitas horas de sueño no hay problema. Esto te quita mucho tiempo, pero aún así siempre intento conciliar. Por mí y por mi familia”.

Su mayor dificultad se sale de estudios: “Mi mayor problema al frente del negocio siempre ha sido mandar. No me gusta mandar, me cuesta”, a lo que añade “al final es tu negocio y tienes que sacarlo adelante. Si tienes tú, tienes para tus trabajadores. Si no tienes tú, no hay para los trabajadores”.

PANORAMA CONQUENSE

Al echar un vistazo a la capital, Esmeralda afirma que en su sector hay “muchas peluquerías y clientes para todas”. Negocios veteranos y jóvenes que se sumergen en la competencia sana de la ciudad, pero que no sostienen un tejido empresarial tal y como muestran los datos de los últimos informes de ATA y CEAT Cuenca.

La figura de Esmeralda, joven autoempleada, ejemplifica el emprendimiento que busca la ciudad conquense para dar relevo a los autónomos que, por problemas económicos o por jubilación, deciden cerrar sus negocios. Esmeralda declara que: “No me ha costado mucho montar mi empresa. En temas burocráticos tampoco he tenido problemas, al poco de cogerlo ya estaba trabajando, aunque fue todo de locos”.

El emprendimiento se levanta como la forma natural de suplir la pérdida de autónomos en la ciudad, el relevo generacional y la recuperación del pequeño y mediano negocio.

José Carlos: "Si volviese a nacer, no creo que me hiciese autónomo"

José Carlos es actualmente el dueño de la Panadería Hermanos González, negocio familiar que dirige desde hace 20 años junto a sus dos hermanos y con cuatro empleados: “Tomé la decisión porque me gustaba el negocio y era de la familia. Yo ya sabía lo duro que era, pero lo que había fuera tampoco me llamaba la atención”, comenta sobre sus inicios como autónomo.

Para José Carlos, los principales problemas llegan ante la falta de horario fijo: “Voy todos los días de 06:00 a 14:00h, pero luego por la tarde tengo que ponerme con papeleos del negocio. Y tienes que trabajar sábados, domingos y festivos, que es cuando más trabajo hay”.

En cuanto a las vacaciones, afirma que ellos sí cuentan con 30 días de vacaciones al año, pero no pueden ser en verano debido a la carga de trabajo, ni tampoco de seguido.

Sobre la conciliación laboral, el empresario dice que “por mucho que digan, es muy complicado. No es fácil desconectar y disfrutar de tiempo libre. Tampoco tienes mucho tiempo”, en cuanto al salario: “No tengo un sueldo fijo, no sabes lo que vas a cobrar el mes que viene porque depende de la faena”, son algunas de las complicaciones en su etapa cómo autónomo. Aunque, “sin duda, las principales dificultades son los impuestos que te ponen, la falta de capital porque los bancos ya no te dan, las facturas que cada vez suben más…Te tiene que gustar mucho lo que haces”.

SACRIFICADO PERO TUYO

A pesar de las dificultades, José Carlos defiende la autoridad del negocio como motivación para seguir adelante: “Si no es tuyo no aguantas todas las barreras de las que hablamos”, comenta. A pesar de llevar dos décadas al frente del negocio, no ve la posibilidad de dejar de ser autoempleado puesto a que “llevo muchos años trabajando por mi negocio. Yo solo lo dejaría si dejara de funcionar, no por carga de trabajo”, a lo que añade “tengo claro que si volviese a nacer no me haría autónomo, me haría político”.

La situación, aunque compleja, es satisfactoria para el dueño de esta veterana panadería de la ciudad. José Carlos confiesa que, junto a sus hermanos, se dividen las tareas administrativas y eso le permite contar con más tiempo libre después del trabajo, aunque esta no es la tónica habitual según indican los informes de ATA.

AUTÓNOMO VETERANO

José Carlos se hizo autónomo con 20 años y en aquél momento la situación del emprendedor era muy distinta y menos beneficiosa que la actual, ya que no existían muchas ventajas: “A pesar de ello nunca he pensado en dejar la panadería. Esto es muy jodido, pero es mío y llevo muchos años trabajando en él. Irte a otro negocio para ser mileurista, tampoco es ninguna ventaja”.