¿Quién era Constantino Carrasco?: El nuevo protagonista del callejero conquense

El Pleno del Ayuntamiento de Cuenca aprobó el pasado miércoles por unanimidad conceder a Constantino Carrasco un tramo de calle Muela Pinilla en el barrio de San Antón. Pero, ¿quién era exactamente éste hombre y qué méritos realizó a lo largo de su vida para merecer tal distinción?

“Don Constan”,  como se le conocía popularmente en Las Quinientas, fue el párroco de la iglesia de San José Obrero prácticamente desde la inauguración del templo hace media década hasta su fallecimiento, el pasado mes de agosto.

Nacido en Tinajas el 3 de marzo de 1940, Constantino Carrasco fue ordenado sacerdote en la Catedral de Cuenca por el obispo Inocencio Rodríguez Díez el 26 de junio de 1966, junto a otros compañeros como Ángel García Benedicto, párroco de la Virgen de la Luz; o el capellán Francisco Zamora Cañadas, entre otros.

Además, fue canónigo del templo primado de la Diócesis de Cuenca y, durante muchos años, presidió la procesión de San Isidro Labrador (Vulgo de Abajo), ermita afecta a su parroquia.

Según recuerda José Vicente Ávila en su blog, su llegada a Las Quinientas se produjo a principios de la década de los sesenta para sustituir a Domingo Muelas al frente de parroquia de San José Obrero, poco tiempo después de su inauguración. Constantino cogía así el mando de una barriada muy necesitada en la que desde el primer momento tendió su mano.

Según las declaraciones realizadas a ‘Las Noticias de Cuenca’ por la presidenta de la Asociación de Vecinos de Las Quinientas, Elena Castillejo,  con motivo del fallecimiento del párroco el año pasado,  “Don Constan era una persona maravillosa con todos, que ayudaba y trataba a todos por igual, desde al más alto al más bajo, a los que son creyentes y a los que no, a los gitanos y a los payos, a los de izquierdas y a los de derechas”.

Fue así un párroco muy involucrado con las necesidades económicas de Las Quinientas, uno de los barrios más afectados por la crisis en la capital. Él se encargaba de gestionar las ayudas de alimentos que la parroquia destinaba a los más necesitados, “yendo incluso al supermercado a comprar comida y poniendo el dinero de su propio bolsillo”, según subrayaba Castillejo.

Por todos estos méritos, la Hermandad San José Obrero y la Asociación de Vecinos de las Quinientas pidieron el año pasado al Ayuntamiento de Cuenca la concesión de un tramo de calle en el barrio. Un recuerdo físico en el callejero que perpetuará la huella que “Don Constan” ha dejado en el corazón de los vecinos de Las Quinientas.