Vive el Carnaval como nadie y lo disfruta igualmente como nadie. Para él, no es una fiesta cualquiera. Todo lo contrario. Se trata de unos días muy especiales en los que dar rienda suelta a la imaginación, la fantasía, la alegría y, sobre todo, al humor, mucho humor.
Y no es para menos, si se tiene en cuenta que su relación con el Carnaval le viene de toda la vida. No en vano, con tan solo unos meses ya le disfrazaba su madre y, desde entonces, año tras año, no ha faltado a esta cita tan especial con don Carnal, al principio en compañía de sus primos y las amigas de su madre y, después, con sus amigos y amigas.
Pero, sin duda, la de este año será más especial, si cabe, ya que “tendrá el honor y el orgullo” –como él mismo dice– de pregonar el Carnaval de su municipio, Tarancón. Toda una oportunidad que Javier García Adrada (Tarancón, 1995) difícilmente podrá olvidar. Y es que, para él, el haber sido elegido como pregonero del Carnaval “es todo un reconocimiento, una manera de agradecer todo lo que hago por mi pueblo”.
De hecho, su implicación, compromiso y disposición a colaborar en todo que se le propone es casi una seña de identidad, hasta el punto de que, como él mismo dice, se le conozca como “Dios”, porque “está en todas partes”.
Así, por ejemplo, además de formar parte de la Comisión de Festejos, pertenece a casi todas las hermandades de la Semana Santa taranconera –salvo dos–, es miembro de la conocida Peña El Mosto, voluntario de la Asociación Española contra el Cáncer, presidente de la Hermandad de San Cristóbal y ha ostentado la presidencia del grupo de teatro Serparke durante ocho años.
No duda en confesar su nerviosismo, que “cada vez es mayor cuanto más se acerca la fecha del pregón (el 11 de febrero a las 20:00 horas en el Auditorio Municipal), puesto que “no deja de ser una gran responsabilidad”.
EL PREGÓN
Aun así asegura que prácticamente lo tiene listo y se encuentra “a falta de las últimas pinceladas”, aunque reconoce que hay mucho que preparar. Y es que el acto, según avanza, no se reducirá exclusivamente a la lectura del pregón, sino que contará con un audiovisual sobre su vida ligada al Carnaval, dos coreografías del grupo de baile español Estampa Flamenca y una actuación del grupo Adáptate Tú, sin olvidar un pequeño pase con algunos de sus disfraces favoritos de Carnavales pasados.
Un completo pregón que no es de extrañar que conlleve para García Adrada numerosos agradecimientos hacia todas aquellas personas, grupos o establecimientos que lo van a hacer posible y que, sin duda, son muchos; desde los citados grupos de baile por su actuación hasta la directora de Estampa Flamenca, Ana Belén Díaz, por la elaboración del audiovisual en torno a la faceta carnavalera del pregonero, pasando por Conchi Urbanos por la confección de su disfraz, la Floristería Aragón por encargase de la decoración del escenario o el Hotel Ansares por la cesión de sus instalaciones para la realización de las fotos oficiales.
El apoyo de su familia ha sido fundamental en este reto, “sin ella, sin duda, no hubiera sido posible”, indica. Es por ello que no duda en asegurar “sentirse afortunado”.
En su pregón buceará en toda una vida en torno al Carnaval. Un pregón en el que, tal y como apunta, “habrá recuerdos, emoción y, por supuesto, humor y anécdotas de todo tipo”. De hecho, a lo largo de las líneas, “recordaré a muchas personas, algunas de ellas ya no están con nosotros, como es el caso de mi abuela, que la perdí hace dos años y que era a quien le cogía los vestidos para disfrazarme cada Entierro de la Sardina”.
Lo que busca, en definitiva, es que “los taranconeros dejen a un lado por un momento los problemas diarios y que lo pasen muy bien con todo lo que estamos preparando para ese día y, de esta manera, den la bienvenida a los Carnavales de este año”.
VISIÓN DEL CARNAVAL
Y es que, a su juicio, hay que vivirlos de manera plena e intensa. Así, al menos, dice afrontarlos él cada año, participando en todo lo que puede, desde el acto del pregón hasta el Domingo de Piñata. “Salgo prácticamente todos los días. Participo tanto en el desfile del sábado de Carnaval como en el infantil del domingo, además de disfrazarme las tardes del lunes y del martes y, por supuesto, salir en el Entierro de la Sardina y, desde primeras horas de la mañana y hasta que el cuerpo aguante, en la Fiesta de los Años 60”, subraya.
Si tuviera que elegir uno de esos momentos carnavaleros, sin duda, se inclinaría por el Entierro de la Sardina, por la gran carga afectiva que tiene para él: “Ese día me trae muy buenos recuerdos de cuando iba a casa de mi abuela para llevarme uno de sus vestidos sin que se enterara”, afirma, al tiempo que asegura que también le gusta el sábado de Carnaval, con su desfile y concursos.
