Viaje inmersivo por el paisaje de contrastes de El Záncara
La comarca de “El Záncara”, situada en la Mancha Baja conquense, vuelve a apostar un año más por estar presente en Naturama, la Feria de la Naturaleza y el Medio Ambiente por excelencia de Cuenca, un escaparate inmejorable para dar a conocer los encantos naturales y patrimoniales de este amplio territorio del sur de la provincia conformado por treinta y tres municipios. Una tierra de contrastes, donde el viñedo, cereal, montes, ríos y lagunas que surgen de lo más profundo conforman un paisaje único
La naturaleza ha dotado esta comarca de una espectacular belleza en cada época del año, parajes naturales llenos de encanto. La Mancha conquense, llanura inmensa, es tierra, agua…, y un variado paisaje de campos de cultivo que ofrecen una sinfonía de colores a la que es imposible no abstraerse. Rojos, naranjas, amarillos, morados, azules, verdes… envueltos en los aromas característicos del romero, tomillo y espliego.
Además, la zona alberga una rica diversidad de aves migratorias que descansan en las lagunas y humedales endorreicos de la Reserva de la Biosfera de la Mancha Húmeda, áreas protegidas para la fauna silvestre, que además posibilitan la realización de infinidad de actividades de ocio y tiempo libre en un entorno incomparable.
Mostrar todo el potencial patrimonial y riqueza natural de este territorio es el objetivo que ha llevado a la Asociación de Desarrollo Rural “El Záncara” a estar presente un año más en Naturama, que se celebra del 27 al 29 de septiembre en el recinto ferial de la Hípica
Su stand es una ventana abierta a este paraíso manchego, donde los visitantes descubrirán el enorme potencial turístico de la zona.
A través de material informativo, los asistentes podrán planificar escapadas y rutas a pie, en bicicleta o a caballo, diseñadas para que los sentidos disfruten al máximo de la naturaleza y el patrimonio que ofrece esta comarca conquense
El río Záncara, que cruza la comarca y le da nombre, es un auténtico tesoro natural que a lo largo de su recorrido deja a su paso antiguos molinos de agua, pozos, puentes, abrevaderos para el ganado, lavaderos, casas de labranza o posadas que evocan la vida rural de otros tiempos.
Pero no solo la naturaleza destaca en la comarca: su patrimonio arquitectónico es igualmente relevante. El Záncara está salpicada de yacimientos arqueológicos, iglesias, castillos, conventos, molinos de viento y casas señoriales que son testimonio de un rico pasado histórico.
Este vasto legado cultural ha sido modelado por el paso de diversas civilizaciones, desde los celtíberos y romano, que han dejado huella en sus ciudades, calzadas, o las minas de lapis Specularis que hoy suponen un reclamo para atraer visitantes.
Tierra de personajes ilustres reales como Jorge Manrique, el Marqués de Villena, el Infante Don Juan Manuel, Fray Luís de León, Eugenia de Montijo… y de ficción como Don Quijote y Sancho han dejado huella en esta comarca.
En esta tierra, cultura y tradición se entrelazan. La artesanía local refleja las raíces más profundas del carácter de un pueblo y sus gentes, que se distinguen por su naturaleza abierta y hospitalaria.
En definitiva, la comarca de El Záncara ofrecerá a los visitantes de Naturama un viaje inmersivo a través de su naturaleza y patrimonio, que invita a una escapada ideal llena de rutas, cultura y experiencias inolvidables. Además, quienes se acerquen a su stand podrán llevarse un obsequio, como símbolo de hospitalidad de un pueblo que se enorgullece de su legado y de su apertura hacia quienes lo visitan.