Los últimos hallazgos en El Provencio completan el molar de un mamut de la estepa
Llevan desde 2019 recuperando restos de mamut, caballos y otros animales de tamaño medio del yacimiento paleolítico de El Pinarico, en El Provencio, pero no ha sido hasta ahora cuando el equipo de investigación, dirigido por el arqueólogo conquense Santiago David Domínguez Solera, ha podido completar el molar de un mamut de la estepa.
Los últimos hallazgos en la intervención de urgencia acometida hace tan solo unas semanas, en el mes de diciembre, en este yacimiento han sido importantes para seguir avanzando en la investigación del Paleolítico Inferior y Medio en El Provencio; un estudio iniciado en 2013 que cuenta con la colaboración del Instituto de Evolución en África (IDEA).
De hecho, tal y como explica a Las Noticias de Cuenca el arqueólogo Domínguez Solera, las intensas lluvias del mes de noviembre dejaron al descubierto diversos restos óseos de animales del Pleistoceno, lo que hizo necesaria intervenir cuanto antes para recuperarlos y evitar que se pudieran perder.
Entre los hallazgos, además de restos óseos de caballos y otros animales de tamaño medio, que podrían corresponder a ciervos, jabalíes o hienas, se encontraron más láminas de molares de un mamut de la estepa, que, con las rescatadas en los últimos tres años, se ha logrado completar un molar, con unas dimensiones aproximadas de unos 40 centímetros de largo y una anchura de entre 10 y 15 centímetros. Molar éste que se suma a otros del mismo animal, que, sin embargo, todavía no se han podido completar.
Una vez sean analizados, consolidados y pegados los restos, se reconstruirá este molar de 40 centímetros de largo y de entre 10 y 15 de anchoRESTAURACIÓN
Ahora toca, según subraya el también arqueólogo de Heroica Arqueología y Patrimonio Cultural, enviar estos restos al Instituto de Evolución en África, donde la conservadora Lucía Hernández-Vivanco, que también forma parte del equipo junto a otros de sus compañeros, se va a encargar de analizarlos, restaurarlos, consolidarlos y pegarlos con el objetivo de poder reconstruir por completo este molar en el Museo Arqueológico de Cuenca.
Un elemento muy interesante, a su juicio, porque se trata del molar de uno de los especímenes de mamut de la estepa (Mammuthus trogontherii) más al sur de Europa. Un ejemplar adulto, de entre 800.000 y 300.000 años de antigüedad, de uno de los mamut de mayor tamaño que ha habido en la Península en el Paleolítico con una altura hasta los hombros de unos cuatro metros.
De hecho, los machos tenían colmillos espiralados con una punta recurvada, que podría llegar a medir hasta los 5,2 metros de longitud, mientras que los de las hembras eran más delgados y ligeramente curvados.
GRANDES ESPECTATIVAS
Domínguez Solera tiene puestas muchas esperanzas en este yacimiento, que forma parte del complejo general de El Provencio, junto a otros como ‘Pinar de la Vega’, ‘Los Marines’ o ‘El Tostado’. Un yacimiento éste, El Pinarico, que, tal y como subraya, no solo es paleontológico, sino también arqueológico, puesto que no solo se han descubierto en él numerosas herramientas líticas de sílex y cuarcita, sino también los mencionados y numerosos restos óseos de mamut, caballo y otros animales de tamaño medio, como ciervo, jabalí o, incluso bisonte, especies propias del Pleistoceno.
Es tal la diversidad del ecosistema original que hasta se han descubierto almejas de río; concretamente, de una especie ya extinta de la familia de las Corbiculidae, que se han localizado en su estrato de arena, “siendo de los pocos hallazgos de este tipo de almeja en su propia estratigrafía en la Península”, según remarca Domínguez Solera. Descubrimiento que, tal y como apunta, permiten saber más sobre el ecosistema pleistocénico de esta zona ubicada en el antiguo cauce del río Záncara en su confluencia con el Rus.
Por todo ello, el director de la investigación considera que este yacimiento tiene aún mucho por ofrecer, de ahí que sea de la opinión de que es necesario acometer una campaña de excavación sistemática en estas terreras para intentar recuperar todo lo que se pueda, ya que se cuenta tanto con microfauna como megafauna.
