DIPUTACIÓN FERIA DEL LIBRO
Es noticia en Provincia: Sanidad Sucesos felinos ATC Villar de Cañas Eclipse Turismo Cuenca Grupo Rujamar Política Emprendimiento
Turismo activo en Cuenca

El turismo rural salva los muebles con unos buenos meses de julio y agosto

La ocupación de los alojamientos rurales de la provincia ha rondado el 70% en julio, mientras que en agosto se sitúa en torno al 90%, si bien en La Serranía muchos establecimientos rozan el 100%
Foto: Casa Rural El Escalerón
24/08/2020 - Miguel A. Ramón

Después del accidentado inicio de la temporada, con un parón total de la actividad durante más de tres meses por el estado de alarma ante la pandemia de la Covid-19, el turismo rural de la provincia de Cuenca parece tener un respiro. La notable afluencia de visitantes que ha optado por un alojamiento rural para pasar unos días en la provincia durante el mes de julio y en lo que llevamos de agosto ha permitido a este sector tan importante en la economía conquense salvar, en parte, los muebles y afrontar la recta final de la temporada con otros ánimos. Así lo pone de manifiesto el presidente de la Federación Castellanomanchega de Turismo Rural (FECAMTUR), Juan Carlos Tébar, ante el nivel de ocupación que se ha venido registrando hasta ahora no solo en Cuenca, sino también en Castilla-La Mancha.

Y es que, tal y como recalca, se ha experimentado en estos dos meses un incremento medio de entre el 10 y el 20 por ciento de la ocupación en este tipo de establecimientos turísticos con respecto al mismo periodo del año anterior, lo que ha permitido que el mes de julio haya resultado bastante aceptable alcanzando una media del 70%. Porcentaje que en agosto se ha disparado al 90 por ciento, si bien en La Serranía conquense es tal la afluencia de turistas que están rozando el lleno en muchos de los alojamientos rurales. Algo que confirma Fernando Rodríguez, uno de los propietarios del complejo rural El Escalerón, situado en Uña, asegurando que han experimentado en este periodo un incremento en la demanda hasta el punto de que la ocupación ha rondado el 90 por ciento en julio y está rozando el lleno durante agosto.

No es de extrañar que muestre su satisfacción por la respuesta que está teniendo el turismo de interior y que, según dice, “viene a salvarnos la temporada; eso sí, si no cambian las cosas, claro, porque si volvemos al confinamiento la situación daría un vuelco total”.

El turismo rural salva los muebles con unos buenos meses de julio y agosto

PERFIL DEL TURISTA

Los turistas que han optado por nuestra provincia han vuelto a ser eminentemente nacionales, al igual que otros años. De hecho, la procedencia mayoritaria de los visitantes, tal y como subraya Tébar, ha vuelto a ser Madrid, Comunidad Valenciana y Región de Murcia, si bien se ha registrado un notable aumento de los turistas procedentes del resto de Castilla-La Mancha. Algo que no ha dudado en tildar de “muy positivo”, porque, según señala, “parece haber calado el mensaje de que era el momento de echarnos un cable entre nosotros y la verdad es que, en ese sentido, estamos muy contentos”.

Un turismo de proximidad que, según el copropietario de la Casa Rural El Escalerón, ha sido “muy bienvenido”. En este sentido, ha indicado que el turismo familiar es el denominador común de la gran mayoría de sus clientes, aunque este año se ha notado una mayor afluencia de grupos de amigos, “probablemente por las restricciones en las playas por la Covid y como consecuencia de tantos meses sin poder estar juntos por el confinamiento”.

PENDIENTES DE LA COVID

Pero el buen comportamiento del turismo hasta el momento no hace olvidar al sector la amenaza de la pandemia y, según subraya tanto Tébar como Rodríguez, no han dejado de mirar de reojo la evolución de la Covid-19 ante los continuos rebrotes, que no hacen otra cosa que generar inquietud e incertidumbre a un sector especialmente castigado por la pandemia.

De hecho, el presidente de FECAMTUR deja claro que el coronavirus está influenciando en gran medida el comportamiento del turismo, hasta el punto de que en estos meses se producen bastantes cancelaciones de última hora, aunque afortunadamente se está compensando con un mayor volumen de reservas. Una situación que les está obligando a vivir prácticamente al día, aunque confían en que septiembre vaya a ir bien, a tenor de las reservas ya existentes.

El turismo rural salva los muebles con unos buenos meses de julio y agosto

Como es de esperar, las buenas cifras del turismo rural en los meses de julio y agosto en la provincia de Cuenca se está reflejando directamente en la demanda de actividades multiaventura. No en vano, desde la Asociación Profesional de Turismo Activo de Cuenca (APTAC), su presidente, Martín Brau, asegura a Las Noticias de Cuenca que la demanda de este tipo de actividades se ha visto incrementada este año en un 25 por ciento aproximadamente con respecto al año anterior; algo que ha sido acogido, como es lógico, con gran satisfacción en el sector, después del parón en seco de la actividad en meses tan importantes como mayo y junio.

En palabras de Brau, “el mes de julio ha sido impresionante, porque La Sierra ha estado saturada de turistas, más que ningún año, y, en cuanto a agosto, va igual, por encima del año anterior”. Es por ello que no dude en asegurar que este algo más de mes y medio esté permitiendo a las empresas del sector “sacar adelante la temporada, aunque, por supuesto, no se llegue, ni por asomo, a los niveles de años anteriores, puesto que hay que tener en cuenta que los negocios estuvieron cerrados en meses como abril, mayo y junio, muy propensos a actividades de este tipo durante los fines de semana”.

En esta línea se ha pronunciado Juan Alique, responsable de actividades de la empresa Multiaventuras Los Barrancos, enclavada en Villalba de la Sierra, que ha calificado el mes de julio como “bastante bueno”. En su opinión, “parece haberse notado, y mucho, esos más de tres meses de confinamiento, que han provocado que la gente tenga muchas ganas de disfrutar de la naturaleza en vivo y en primera persona”.

El turismo rural salva los muebles con unos buenos meses de julio y agosto

DEMANDA Y PERFIL

En cuanto a los días con mayor demanda, Brau llama la atención sobre los fines de semana, que es cuando se están produciendo los mayores picos, hasta el punto de que se estén produciendo aglomeraciones en actividades puntuales como el descenso de barrancos o el piragüismo. No obstante, entre semana también hay demanda, aunque más bien se concentra en ese turismo familiar que se ha desplazado a la provincia a pasar unos cuantos días.

Como es de esperar, el turismo nacional supone el 95 por ciento de los demandantes de actividades en la naturaleza, en especial familias y grupos de amigos, entre otros motivos, porque también es el mayoritario en el turismo rural, si bien la procedencia varía dependiendo del mes. Así, tal y como subrayan tanto Brau como Alique, en julio predomina el turismo de proximidad procedente de provincias como Madrid, Valencia, Alicante o Murcia, que este año han venido en mayor número, mientras que en agosto se trata de un turismo familiar con estancia más larga, por lo que vienen más del norte de la Península.

ACTIVIDADES DEMANDADAS

Barranquismo, vía ferrata y piragüismo continúan siendo las actividades multiaventura más demandadas por los turistas que visitan nuestra provincia en esta época. Y es que, tal y como recalcan, la oferta existente es muy buena, lo que, sin duda, la hace muy atractiva para el visitante. Tal es el caso, el descenso de los barrancos del Cortado de Villalba de la Sierra, que se oferta a partir de 6 y 7 años de edad, las vías ferrata del Ventano del Diablo o Priego que son un reclamo muy importante o el pantano de La Toba para la práctica del piragüismo en aguas tranquilas.

Si bien, desde APTAC, se llama la atención sobre el hecho de que, como viene siendo habitual, la demanda se va reduciendo a partir de la recta final del mes de agosto como consecuencia de la bajada de temperaturas propia de estas fechas en nuestra provincia. Aún así, el sector espera que los fines de semana continúen aglutinando durante septiembre la demanda de turismo activo y permita al sector salvar más o menos la temporada, aunque, según recuerdan, en ello también tiene mucho que decir la evolución de la pandemia, que, por el momento, no está siendo especialmente mala en nuestra provincia, lo que está posibilitando que aún seamos un destino atractivo.