Greenpeace pide paralizar la granja de gallinas de Rujamar en San Clemente

Greenpeace ha presentado alegaciones para exigir la suspensión del proyecto de granja avícola promovido por el grupo Rujamar en San Clemente (Cuenca), con capacidad para 1.080.000 gallinas ponedoras, y ha criticado que se apueste por la ganadería intensiva en un momento de repunte de la gripe aviar.
Según ha informado la organización ecologista en nota de prensa, han presentado el documento con hasta ocho alegaciones ante el Ayuntamiento de San Clemente para exigir que se suspenda el proyecto, que actualmente está en fase de información pública.
Greenpeace basa sus alegaciones en las emisiones de amoníaco de estas instalaciones, la distancia mínima hasta las viviendas, deficiencias en el estudio de impacto ambiental o en la situación de la ganadería industrial.
Asimismo, la organización ha recordado que en 2021 el grupo avícola Rujamar a propuso una instalación, en aquel momento para 1,5 millones de animales, que fue "suspendida tras el amplio rechazo social".
El responsable de la campaña de ganadería de Greenpeace, Luis Ferreirim, ha criticado que mientras la gripe aviar "está arrasando millones de aves de corral y silvestres en España", se siguen "planteando proyectos industriales de ganadería intensiva".
Ha aseverado que "las macrogranjas son una auténtica bomba de relojería, y parece que estamos esperando a que nos explote una en las manos".
Por ello, la organización ha pedido al Gobierno una moratoria inmediata para la ganadería intensiva, una reducción drástica de la densidad de animales en explotaciones existentes, el cierre de las que están cerca de núcleos urbanos o la reducción de la cabaña ganadera intensiva hasta alcanzar un 50 % menos en 2030.