"Quiero hacer canciones que te hagan levantar la cabeza"
Julia Saiz Garrote (Cuenca, 2000) ha amado la música desde pequeña. En el colegio estaba deseando que llegara la asignatura de música, algo que compaginó asistiendo a clases de guitarra y coro en el conservatorio Pedro Aranaz de Cuenca. Cuando iba a empezar las clases de piano, entró en la adolescencia y decidió pausar sus estudios musicales, pero eso no influyó en que ya con 11 años, Julia compusiera sus canciones.
Ella tenía claro que la música sería su forma de vida, aunque no siempre se atrevió a mostrarla. La vergüenza en su adolescencia le impidió mostrar al mundo el potencial que ella tenía, pero cuando empezó a escuchar trap y rap, sintió que podía crear algo diferente, tener una voz más auténtica, más suya.
Así nació La JuliKa, una tía chula, empoderada, que habla de cosas íntimas, de amor y desamor, pero todo ello con una fuerza que la hace única. “Todo lo que componía era algo que tenía guardado para mí”, asegura en una entrevista con Las Noticias de Cuenca, pero estudiando en la universidad en Granada, en concreto Ciencias de la Actividad Física y el Deporte, llegó un punto de inflexión que lo cambió todo.
Se hizo amigo de un productor musical, quien le animó a grabar su primera canción. “Me insistió tanto que al final lo hice, aunque me dije que nunca sacaría esa canción”. Se refiere a ‘Violento’, su primer tema, que vino gracias a vivir en una ciudad “donde se respira muchísimo arte, algo que me dio el empujón que necesitaba”.
Desde entonces, La JuliKa no ha dejado de crear. En 2023 publicó su primer EP bajo el título ‘Mudando la piel’, un trabajo de tres temas que retrata un proceso personal de cambio y empoderamiento. Meses después lanzó su primer álbum, ‘Los kilómetros que me hice por tí’ (LKQMHXT), con ocho canciones que narran una historia de amor, ruptura y aprendizaje. “Es mi trabajo más denso y del que más orgullosa estoy, puesto que son canciones muy sentidas, muy mías”.
Para Julia, componer es una necesidad vital. “Tengo muchísimas canciones sin sacar, porque escribir es mi manera de desahogarme y de narrar lo que me pasa”, asegura, añadiendo que cuando ve que varias de esas canciones hablan del mismo proceso vital, las une, y de ahí pueden surgir un EP o un disco. “La música siempre llega después de haberla vivido”.
Por ese motivo, sus letras son honestas y directas, reflejo de una artista que no teme mostrarse vulnerable. Pero también de una mujer que se reivindica en un mundo musical donde, asegura, aún hay barreras. “Las mujeres tenemos que trabajar cuatro veces más”.
Y es que, no duda en afirmar que a un hombre “le basta con subirse al escenario y mover un pie para que le aplaudan, pero nosotras tenemos que demostrarlo todo y por eso me gusta que hoy la gente me vea como una mujer empoderada, es algo que me llena de orgullo”, deja claro.
La trayectoria de La JuliKa empieza a consolidarse según transcurre el tiempo: debutó el año pasado en el Festival de Otoño de Cuenca, y este 2025 repitió con un show más ambicioso. “Cada vez intento superar el anterior, y de hecho hemos incluido un cuerpo de baile, y es la primera vez que yo misma voy a bailar en el escenario”, comenta.
También ha llevado su música fuera de Cuenca, con actuaciones en lugares como Ledaña, donde compartió escenario con artistas emergentes de todo el país. “Me contactaron por Instagram y dije: ‘claro, vámonos para allá’, y fue una experiencia increíble”.
En cuanto a sus próximos pasos, Julia tiene claro que quiere volver al origen, al trap más puro. “Hay un subgénero que me tiene loca, el plugg, con esos graves retumbando, muy agresivos, y por eso me apetece sacar algo más bailable, más empoderado”, asegura La JuliKa, quien lleva ya “mucho tiempo haciendo canciones de llorar”. “Ahora quiero hacer canciones que te hagan levantar la cabeza”.