"El comercio de Cuenca nos necesita a todos para remontar"

Cuenca da un paso más este lunes en la desescalada del confinamiento al que nos ha llevado la pandemia por coronavirus y entra en la fase 2. La vida social y económica se flexibiliza y, por ejemplo, los establecimientos y locales comerciales minoristas y de actividades profesionales ya pueden reabrir al público con independencia de su superficie útil de exposición y venta. Además, el aforo de los comercios pasa del 30 al 40%.

Un avance más hacia la recuperación de uno de los sectores más afectados por la pandemia. “Cerrar la persiana fue un gran esfuerzo, pero subirla también” señala la concejal de Comercio y Seguridad Ciudadana Allady Rodríguez, quien incide en que el comercio es uno de los pilares económicos de la ciudad y su recuperación necesita del esfuerzo de todos para generar sinergias que ayuden a remontar.

“Si la economía se mueve, nos beneficia a todos”, afirma la edil, al tiempo que destaca que dentro del plan de apoyo al comercio local, el ayuntamiento pondrá en marcha una campaña de sensibilización y promoción para incentivar las compras de cercanía.

Los comerciantes han adoptado todas las precauciones y medidas necesarias para garantizar la seguridad tanto de clientes como de trabajadores. “Comprar en Cuenca es seguro”, y además en estos momentos es “vital” añade Allady Rodríguez.

Respecto a la reconversión a la que obliga la nueva normalidad, apunta que el comercio online “ha llegado para quedarse”. La digitalización de las empresas es una de las principales demandas de los comerciantes y por ello desde el Consistorio pondrá en marcha un ambicioso plan que contempla tanto la formación y capacitación de los comerciantes como una plataforma común de venta online.

Pero estas no son las únicas líneas de ayuda que contempla el Ayuntamiento de Cuenca también es consciente del incremento de gastos que, para garantizar la seguridad, están teniendo los comercios, por ello la concejala señala que se está estudiando la posibilidad de poder habilitar ayudas.

¿Desde su apertura de preparación en la fase 0 como está funcionando el comercio en Cuenca?

La primera semana había muchos miedos pero a medida que fueron pasando los días se ha ido animando. Contar con ayudas y con la protección adecuada para poder abrir de una manera ordenada ha mejorado la situación. A esto se suma también que la población ha mostrado una actitud muy positiva para la compra y todo eso ha generado un ambiente de confianza tanto para el pequeño comercio como para los consumidores.

Pero la recuperación costará y por eso necesitamos el apoyo de todos. De las instituciones, de la población y del pequeño comercio también, porque a veces hay pequeños detalles que se nos olvidan. Que aprendamos a trabajar de manera colectiva es fundamental en este momento.

Recientemente el Ayuntamiento avanzaba que se destinará medio millón de euros para revitalizar el comercio local ¿Cuáles son las son las líneas del plan de apoyo?

Una de las líneas de apoyo que vamos a poner en marcha, porque además así nos lo demandan los propios comerciantes, es la digitalización del pequeño comercio. Hace tiempo que el e-commerce está en auge pero en esta pandemia hemos visto su importancia. La venta online llegó para quedarse y es necesario que las empresas se adapten.

En Cuenca hay muchos negocios que ya trabajan el comercio electrónico, conocen las herramientas y lo manejan muy bien pero hay otros que no. Por eso vamos a generar esa línea de trabajo, para el que lo necesite pueda contar con un apoyo personalizado para enseñarle cómo se crea una página web, cómo vender sus productos o servicios y cómo hacer que sean más llamativo de cara a la clientela. Creemos que en estos momentos es fundamental, y por ello desde el Ayuntamiento estamos trabajando también en la puesta en marcha de una marketplace desde donde las empresas de Cuenca puedan promocionar sus productos.

En este momento lo que nos transmiten tanto desde la asociación de Comercio como desde Ceoe-Cepyme es la digitalización y el apoyo en campañas publicitaria para concienciar a la población de la necesidad de consumir comercio de proximidad. Y eso es lo que tenemos en marcha.

Decía anteriormente que la respuesta de la ciudadanía ha levantado los ánimos al sector, que ya se resentía antes de esta crisis ¿Se percibe una mayor complicidad?

Yo creo que la mentalidad de todos ha cambiado con esta crisis y somos conscientes de que el comercio nos necesita a todos. Por supuesto que necesita a las Instituciones, sí, pero sobre todo necesita a todos los conquenses. Y eso es lo que queremos recordar con la campaña de sensibilización.

Además, en estos momentos de dificultad el consumo de proximidad es vital, y no solo para el comercio, sino para todos. El dinero se queda aquí y crea un círculo que lleva al bienestar de la ciudad. La población tiene que ser consciente, y yo creo que lo es por la forma positiva en la que ha salido a comprar en la fase 1.

Por nuestra parte, no hemos parado de trabajar. Durante la etapa más difícil del confinamiento no hemos dejado de mantener contacto con los comerciantes y hemos celebrado además varias reuniones para conocer sus necesidades y ver la mejor manera de actuar.

Al ayuntamiento, desde luego, lo van a tener cerca, pero insisto en que es importante que todos valoremos el esfuerzo que está realizando el sector. Bajar la persiana fue duro pero subirla también supone un esfuerzo económico, físico y mental porque mucha población se ha visto afectada no solo económicamente sino emocionalmente por esta pandemia.

¿Se habilitará además alguna línea de ayudas?

Sí, se está estudiando la posibilidad de otras líneas de ayuda. Vamos a trabajar desde muchos aspectos para, entre todos, ayudar al pequeño comercio que se ha visto tan afectado, ya sea a través de la Concejalía o del convenio que tenemos con CEOE. Es decir, vamos a mirar desde cada línea de qué manera podemos enfocar las ayudas para que el comercio pueda resurgir, que es lo que más nos interesa.

Desde la administración central y regional se han habilitado ayudas para las pymes y pequeñas empresas y de forma paulatina tendremos que ir trabajando para que las ayudas no se solapen y que podamos ir cubriendo en el tiempo las necesidades que se planteen. Ahora estamos en fase de desescalada pero no sabemos si habrá un repunte, todo es nuevo con esta pandemia y tenemos que ir adaptándonos a la situación y estar preparados cada vez más para afrontarla de una manera asertiva.

¿Respecto a la seguridad se está encajando bien o hay reticencia por parte del público?

Me alegro mucho de esta pregunta, porque hay que dejar claro que comprar en Cuenca es seguro. Los comerciantes han hecho un gran esfuerzo preparando sus establecimientos para atender a su clientela de una manera segura protegiendo su salud y la de los trabajadores.

Tenemos que ser cautos y adoptar todas las medidas de seguridad, esa es la responsabilidad de todos, pero sin miedos excesivos porque el comercio se ha preparado y es importante que se sepa que es seguro ir a comprar. Que hay que tomar ciertas medidas de precaución, sí. Pero en este momento es seguro comprar tomando nuestras propias medidas y adaptándonos a las que las tiendas recomiendan que se cumplan.

Los comerciantes han hecho un gran esfuerzo preparando sus establecimientos para atender a su clientela de una manera segura

¿Se han quedado negocios en el camino en este proceso?

Por desgracia sí, pero en algunos casos lo que vemos es que se ha producido un cambio. Se ha cerrado la tienda física pero sigue la actividad online. De ahí que sea tan importante en estos momentos la digitalización de las pequeñas empresas, porque ahí Cuenca tiene un valor importante. Y es que hay mucha gente joven con proyectos empresariales interesantísimos que no se pueden dejar detrás.

Las cosas van a cambiar y a evolucionar sí, pero nos adaptaremos a las nuevas nuevas medidas y a la situación en la que nos enfrentamos y para ello, insisto, el comercio nos necesita a todos para remontar. Ese es el mensaje fundamental, que entre todos seamos capaces de crear sinergias, aportando lo que cada uno pueda, para que esto salga a flote.