La ecología y la digitalización. Son las dos piedras angulares del futuro del Grupo Alborada, una funeraria que apuesta por el cambio y la innovación. La preocupación por el cuidado del medioambiente ha llevado a este negocio conquense a poner en marcha un proyecto de transformación de gran envergadura.
Los dos primeros pasos dentro de esta iniciativa ya han comenzado. El equipo de la funeraria, consciente del reto actual que supone el cambio climático y la contaminación, ha introducido la energía solar para el funcionamiento de las instalaciones. A su vez, su catálogo ofrece una amplia gama de ataúdes y urnas elaborados con materiales respetuosos para la naturaleza y con maderas procedentes de talas controladas. Las familias que acuden al Grupo Alborada también parecen estar más sensibilizadas con esta cuestión. Así lo trasladan Carlos Solera y Jesús Delicado, responsables del tanatorio de Cuenca. Señalan que la demanda de este tipo de féretros va en aumento.
El tanatorio cuenta con una capilla que puede adaptarse a cualquier rito religiosoLos próximos cambios, en los que actualmente trabaja la empresa, son la renovación de la flota de vehículos y la digitalización de todos los trámites burocráticos. El equipo del negocio tiene por objetivo incorporar coches fúnebres híbridos de etiqueta cero que generen menos contaminación. La reducción del uso del papel es otro de los propósitos que persigue el Grupo Alborada. Es esta la razón por la que trabajan en la creación de un programa informático que digitalice todos los procedimientos burocráticos que se llevan a cabo en la compañía. Grupo Alborada no solo tiene una visión de futuro hacia el planeta, también hacia el talento. Es este el motivo por el que desde la empresa se impulsa la formación. “Todos los años recibimos uno o dos alumnos y alumnas en prácticas”, señala Solera. La compañía en este aspecto no solo apuesta por la profesionalización de los futuros empleados en funerarias, también por la inclusión de la mujer en este sector.
SERVICIOS
La organización de un funeral cuesta de media 2.800 euros. El precio mínimo se sitúa en los 1.800 euros, que se correspondería con un sepelio básico sin velatorio ni servicio religioso. El máximo, por el contrario, rondaría los 6.000 euros. El Grupo Alborada, además de las prestaciones elementales de toda funeraria, también gestiona a los clientes servicios de música o catering. El tanatorio cuenta con una capilla que puede adaptarse a cualquier rito religioso según los deseos de cada familia.
Asimismo, la compañía ofrece la posibilidad de un seguro de decesos, es decir, la posibilidad de que una persona prepare el funeral para que sus parientes se despreocupen de esta cuestión. Otro de los servicios más particulares que ofrece es ‘legado genético’, una opción que permite recoger muestras de ADN del difunto para ser utilizadas, en caso de ser necesario, en el futuro.
