Fruterías Fátima, un ejemplo de integración y emprendimiento en Cuenca
Fátima y Hassam llegaron a Cuenca hace más de 35 años buscando una vida mejor. Dejaron atrás Marruecos, su familia y sus amigos e hicieron de la capital conquense su hogar, donde nacieron sus siete hijos.
En estas más de tres décadas, Fátima y Hassam han sido grandes emprendedores. Abrieron un todo a cien, después un bazar y actualmente tienen dos de las fruterías más conocidas y reconocidas de la ciudad, ya no solo por la calidad de los productos que venden sino por su cercanía y simpatía. Y es que, solo hay que pasarse por sus tiendas para ver que conocen a todos sus clientes y les llaman por su nombre. “Aquí todos somos una familia”, reconoce Laila Harrou el Hafydy, una de las hijas del matrimonio que, al igual que el resto de sus hermanos, ayuda a sus padres en el negocio, aunque ninguno de ellos ha descuidado sus estudios. “Mi hermana mayor estudió derecho y ya es abogada, yo estoy estudiando para ser azafata de vuelo y mis hermanos más pequeños están en el instituto. Tenemos muy claro que no podemos abandonar nuestros estudios porque son nuestro futuro”, cuenta Laila.
Y aunque no es fácil compaginarlo todo, la familia Harrou el Hafydy ha encontrado en los productores locales la clave del éxito. Los tomates que venden saben realmente a tomate, los pepinos están cultivados en Palomera, las patatas en Mariana y tienen hongos cuando es temporada, al igual que caracoles o espárragos trigueros. Así, con productos de kilómetro cero y de una calidad altísima han conseguido ganarse la confianza de los conquenses, pero también logran captar a los turistas que pasan por delante de su tienda de Puerta de Valencia. Y no es de extrañar porque los productos de temporada que tienen en el escaparate llaman la atención de cualquiera. No tienen formas perfectas ni brillan artificialmente, son diferentes en tamaño y forma, en definitiva, reales. Y eso, en pocos sitios se encuentra ya. “Siempre que podemos tratamos de comprar a la gente que cultiva en Cuenca y cuando no hay algo aquí acudimos a proveedores de Almería o Murcia. Siempre preferimos las verduras o las frutas que salen de la huerta conquense antes que importarlas de otras provincias”, reconoce Laila.
Además, más allá de vender al por menor también abastecen a varios restaurantes de Cuenca y hacen repartos a domicilio. Incluso publican las novedades en su cuenta de Instagram @fruteríafatima_ donde cada vez están siendo más activos.
Tras más de tres décadas de esfuerzo, sacrificio y dedicación, la familia Harrou el Hafydy ha conseguido afianzar su negocio, pero también ganarse el cariño de la gente.