Tras dos años de ausencia en la competición federada, el FS VivoCuenca femenino vuelve a defender el nombre de la ciudad en el 40x20. Su regreso supone la recuperación de un proyecto que apuesta por el fútbol sala en la ciudad y que, ineludiblemente, quería volver a contar con su plantel femenino.
Las azulonas compiten esta campaña en el Grupo I de la Liga UCLM –Primera Autonómica de Fútbol Sala– con una renovada plantilla y cuerpo técnico. Al frente se encuentra Mohamed Said, jugador del plantel masculino que milita en Segunda División B y buen conocedor del panorama del fútbol sala local.
“Siempre me ha llamado la atención poder entrenar y transmitir lo que he aprendido. Cuando me lo propusieron fue como un reto, me hizo mucha ilusión y lo acepté”, comenta Said, que ya había entrenado previamente a las categorías inferiores del club azulón.
El debut liguero del VivoCuenca Femenino se saldó con un favorable 8-0 ante Las Mesas, con un gran partido en líneas generales en el que destacaron Andrea Serrano y Luna Benito, quienes firmaron cuatro y dos goles respectivamente.
“Esta primera jornada era una prueba importante porque no hemos podido concretar ningún amistoso de pretemporada y era complicado saber a qué nivel estábamos, así que nos ha venido muy bien la victoria”, aprecia el técnico, que confiaba en la afinidad entre las jugadoras.
“Lo bueno es que muchas de ellas ya se conocían de antes o habían jugado juntas, así que en parte ha sido más fácil crear el grupo”, analiza Said, quien por otra parte también ha trabajado con un par de efectivos que venían del fútbol 11, por lo que ha tocado adaptarse. “En las primeras semanas tenían ciertos hábitos que cambian porque hay mucha diferencia, pero poco a poco han ido cogiendo el nivel”, asegura.
En esta segunda etapa de vida, el VivoCuenca Femenino tratará de luchar por el ascenso de categoría
Esta primera jornada ha sido toda una declaración de intenciones, ya que el equipo no esconde su meta de cara a esta temporada: “Nuestro objetivo es el ascenso”, apunta el entrenador. Si bien declara que “cualquiera te puede plantar cara y ganar el partido”, identifica en el UDAF –Albacete– su gran amenaza y rival para este año que ganó por nada más y nada menos que 1-17 al UD Zona C FS en la primera jornada. Ya luchó de manera incansable el VivoCuenca Femenino por el ascenso en su primera etapa e incluso llegó a finalizar un año en primera posición, si bien por temas burocráticos relativos a la Federación no pudieron consumar el ascenso.
Más allá de lo puramente competitivo, es de celebrar el hecho de ver al equipo femenino reunido de nuevo. “Es evidente que hay bastante nivel y cuando llegué al club también me pregunté por qué había dejado de competir. Pero ahora estamos aquí para darle una nueva cara, apoyar en lo que podamos y ayudar a crecer al club y a la ciudad”, asegura enérgicamente.
Desde la presidencia del club, Luis Saiz Pla también recalca la alegría que supone la vuelta de la sección femenina. Desde que se perdió, el objetivo de la directiva ha sido recuperarla, y hoy Saiz celebra que ha encontrado a un buen grupo de jugadoras comprometidas que enriquecen la dimensión del VivoCuenca.
Se suma este relanzado proyecto a la ilusión por el ascenso a Segunda División B del primer plantel masculino. Desde que naciese en 2019, el club ha puesto el fútbol sala en el mapa de Cuenca, creciendo también enormemente en el apartado de su cantera. “Récord de asistencia en liga en el último partido del primer equipo y más de 150 personas en el debut de las chicas. Poco a poco estamos poniendo el fútbol sala donde se merece en Cuenca”, concluye Said.