Intenso partido el que ha enfrentado al Conquense Juvenil y al CD Guadalajara con empate a 2. Tras una primera mitad algo trabada, el choque dio paso a una segunda llena de emoción en la que los conquenses se adelantaron, sufrieron una remontada exprés… y acabaron empatando con un gol de su portero, Amadeo Cuenca, en el descuento.
Salió con mucha más actitud el equipo de Héctor Rubio, protagonizando unas tempranas primeras llegadas reseñables: abría la veda Ronald Monreal con un buen cabezazo que no encontraba portería por poco, sumándose minutos después una intentona que Andrés Hernández no llegaba a cazar dentro del área y también un disparo de Pablo Pérez que se marchaba fuera.
Tras este buen inicio, que dejaba ver a un Conquense muy superior, el partido se fue apaciguando e igualando. El dominio seguía siendo blanquinegro, aunque las ocasiones no eran tan incisivas: por su parte, el Guadalajara también empezaba a finalizar con acciones como un balón al segundo palo que Cristopher Oyono enviaba fuera. Probó fortuna Marco Gallego con un cabezazo en segunda jugada y, antes de enfilar a vestuarios, también trató de sorprender Alejandro Martínez con un lejano y potente disparo al que el portero visitante, Iván Murillo, respondió con una palomita.
Tras una primera mitad de más a menos y algo trabada con el paso de los minutos, daba comienzo una segunda que traería consigo mucha más emoción. Oyono avisó en un uno para uno que el meta local, Amadeo Cuenca, detuvo en una buena salida. En el minuto 69 desatascaría el partido el equipo blanquinegro: Marco Gallego recibió un buen balón a la espalda del central y le ganó la posición, enfilando con decisión en un uno para uno que culminaba por arriba ante Murillo para el 1-0.
No se arrugó el Guadalajara, que en tan solo unos minutos le daba la vuelta al encuentro: ya en la recta final, el visitante Rubén Olmedo recogía un balón largo en una posición algo escorada a la izquierda. En su primer intento se topó con una buena parada de Amadeo Cuenca, si bien el rebote le volvería a caer franco a Olmedo, que anotaba a puerta vacía con un balón al que por poco no llegó la zaga blanquinegra.
La respuesta alcarreña no quedaba ahí, ya que tan solo un minuto después disponía de una lejana falta pegada a la banda izquierda. El centro se paseó por el área sin recibir despeje o remate alguno, chocando con el segundo palo. El rebote causó un barullo en el área y la finalización del Guadalajara acababa dentro de la portería tras tocar involuntariamente en el local Alejandro Martínez.
Fue con todo el equipo de Héctor Rubio, que puso a prueba al Guadalajara con una potente volea de Izan López despejada por Murillo. No obstante, la sorpresa iba a nacer de unas botas inesperadas. Concretamente, las de Amadeo Cuenca, el portero.
A la salida de un córner rocambolesco en el que casi anotaba el Conquense –palo incluido- un balón suelto atrás fue divisado por el guardameta blanquinegro, que no dudó dos veces a la hora de pegarle desde algo más adelantado del borde del área. Ni la defensa ni el meta visitante pudieron hacer nada para evitar un tanto que desataba la euforia en Tiradores. Se le echó encima el equipo al portero Amadeo Cuenca, que ponía el empate para sorpresa de todos en el minuto 93.
Tras el gol, el meta visitante, Iván Murillo, veía la tarjeta roja dadas las acaloradas protestas que dirigió hacia el colegiado del encuentro, ya que entendió que se había producido una mano en el barullo del área previo al empate.
Caliente final de partido con bastantes protestas en la grada y sin tiempo para mucho más en lo deportivo, por lo que el resultado se quedaba en el 2-2.
Rescata así un buen punto en casa el Conquense, que se coloca con 10 en la clasificación para ocupar el 14º puesto, uno por encima del descenso. La semana que viene se medirán a domicilio al Calvo Sotelo Puertollano.