San Antón y todo Buenavista tendrán banda ancha en verano
La plena conectividad en la capital conquense no parece estar relativamente muy lejos. La implantación de la fibra óptica es hoy en día un hecho, salvo, principalmente, en tres claras excepciones, como son una “isla” en el corazón de Buenavista y los barrios de San Antón y Casco Antiguo. Tres zonas blancas que, según el alcalde de la ciudad, Darío Dolz, tienen los días contados. Y es que de una reunión con la empresa Telefónica a mediados de diciembre salió el compromiso de esta operadora de abordar el despliegue “inmediato” de la fibra óptica en estos tres puntos.
Un paso importante, en opinión de primer edil, hacia la plena conectividad de Cuenca, aunque “aún haya que seguir trabajando para solventar ciertos problemas en otros puntos muy concretos de la ciudad”, confiesa.
DESPLIEGUE
Si bien esta operación de despliegue de fibra óptica tendrá dos claras velocidades. Por un lado, los barrios de San Antón y el corazón de Buenavista, donde, según Dolz, la banda ancha será una realidad este verano. Afirmación que sustenta en el hecho de que la operadora de telefonía ya está trabajando en la correspondiente tramitación administrativa y en un proyecto de despliegue de la fibra óptica, habiéndose marcado un plazo máximo de seis meses; sin olvidar que juega a su favor el hecho de que ambos barrios ya dispongan en el subsuelo de sus calles con las necesarias canalizaciones para el cableado.
Otra cuestión bien distinta es el Casco Antiguo. Ahí las cosas van a ir a otro ritmo. Y así lo reconoce Dolz, quien indica que “es verdad que el despliegue de la fibra óptica en el Casco Histórico es más complicado de ejecutar, porque hay que hacerlo palmo a palmo y con el beneplácito de Patrimonio; algo que, sin duda, influirá en la velocidad de ejecución de los trabajos”. Sin olvidar, además, que la resolución del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital marca un plazo máximo de 2 años para completar el despliegue en esta zona de la capital conquense. Periodo que Dolz espera no llegue a agotarse y confía en que finalmente la fibra óptica sea una realidad en menos tiempo, “como así se convino con Telefónica”, subraya.
Ante este complicado escenario, el despliegue de la banda ancha, según el alcalde, se va a ejecutar por sectores con el fin de ir poniéndolos en servicio según se vayan terminando. Y es que “en el Casco vamos un poco a ciegas, puesto que hay que ver qué conducciones existen en el subsuelo para aprovecharlas y hacer lo propio con el cableado aéreo de cobre, sustituyéndolo por fibra óptica. No es cuestión de cablear fachadas”.
Esta plena conectividad es un proyecto “importante” para el Ayuntamiento y así lo pone de manifiesto el alcalde, que llama la atención sobre la cada vez mayor importancia y viabilidad del teletrabajo, como así ha quedado demostrado después de más de tres meses de confinamiento domiciliario por la pandemia. Algo que, tal y como recalca, requiere de esa ansiada conectividad, que, además, hace más atractiva a la ciudad como destino para personas que opten por trabajar desde Cuenca y, por supuesto, para la implantación de nuevas empresas. Al respecto, adelanta que probablemente en unos días haya “buenas noticias” en este sentido.
