Servicio de Emergencias
Cuenca registró 21 incendios en viviendas este invierno, uno de ellos mortal en Quintanar

La provincia de Cuenca ha contabilizado 21 incendios en viviendas durante los meses de invierno, entre diciembre de 2024 y marzo de 2025, según los datos ofrecidos por el Servicio de Urgencias y Emergencias 1-1-2 de Castilla-La Mancha. Uno de estos incidentes, ocurrido en Quintanar del Rey, ha sido el más grave registrado en toda la región, al cobrarse la vida de un joven de 22 años y provocar una grave intoxicación en otro varón de 30 años debido a la mala combustión de una estufa de leña.
En total, en toda la comunidad autónoma se han registrado 98 incendios de vivienda en este periodo, siendo Cuenca la tercera provincia con mayor número de intervenciones, solo por detrás de Toledo (27) y Guadalajara (24). Ciudad Real y Albacete se situaron por debajo, con 15 y 11 siniestros respectivamente.
Según los datos del 1-1-2, más del 70% de los incendios han tenido su origen en chimeneas mal mantenidas, concretamente en la acumulación de hollín en los tiros. Las estufas provocaron 26 incendios, destacando las de pellet sobre las de leña o gas, mientras que los braseros fueron responsables de tan solo dos intervenciones.
En la mayoría de los casos, la coordinación del Centro de Emergencias ha sido clave para movilizar con rapidez a los equipos de bomberos, personal sanitario del SESCAM, fuerzas de seguridad, voluntarios de Protección Civil y técnicos de suministros. En el conjunto regional, 24 personas resultaron afectadas por estos siniestros, en su mayoría por inhalación de humo. En 48 de los 98 incendios fue necesaria la intervención sanitaria y en 94 actuaron los bomberos.
El caso de Quintanar del Rey marcó el invierno en la provincia. El siniestro se produjo a finales de diciembre, cuando una mala combustión de una estufa de leña provocó una intoxicación severa a dos personas. El joven fallecido no pudo ser reanimado y el segundo afectado tuvo que ser trasladado de urgencia en helicóptero medicalizado al Hospital Universitario de Albacete.
Ante estos datos, el Servicio de Emergencias 1-1-2 insiste en la necesidad de mantener en buen estado los aparatos de calefacción, especialmente las chimeneas, para evitar la acumulación de hollín. Asimismo, recomienda estar atentos a los síntomas de intoxicación por monóxido de carbono —mareos, somnolencia o dolor de cabeza— y ventilar de inmediato las estancias afectadas, contactando con los servicios sanitarios si los síntomas persisten.