CCOO denuncia el clima laboral irrespirable en la fábrica de chocolates Ibercacao de Quintanar de la Orden
La Federación Agroalimentaria de CCOO de Toledo ha advertido del “clima laboral irrespirable” que se vive en la fábrica de chocolate de Ibercacao en Quintanar de la Orden, donde desde hace meses “se suceden los despidos disciplinarios, las sanciones, las intimidaciones y las amenazas”, especialmente contra los miembros del Comité de Empresa e incluso contra sus familiares.
En apenas tres meses, se han producido ya diez despidos disciplinarios en una plantilla de un centenar de personas –a las que se añaden otro medio centenar de trabajadores vía ETT-; que se suman a las bajas psicológicas e incluso a solicitudes de bajas voluntarias de personas que no pueden aguantar más la presión a la que les somete el gerente.
Nada más firmarse el convenio provincial del sector, la gerencia de Ibercacao -antigua ‘Chocolates Dulcinea’, perteneciente desde 2009 al grupo Lacasa- , anunció su intención de descolgarse del convenio para rebajar los salarios e incrementar y modificar las jornadas.
Según explicó entonces el gerente, la situación económica de la empresa es buena y sus perspectivas también, pero sus accionistas quieren recortar los salarios y los derechos de la plantilla y así ganar más dinero y rentabilizar a tope ‘la inversión’ que les supuso la compra de ‘Chocolates Dulcinea’ hace cinco años.
Desde ese momento, en la primavera pasada, comenzaron las presiones del gerente para forzar a los trabajadores a aceptar el descuelgue del convenio colectivo provincial del sector, incluso sin atenerse a los procedimientos legales previstos.
“El gerente se han ensañó desde el principio contra los representantes legales de los trabajadores, demonizando al Comité de Empresa, presionando a sus miembros e incluso a sus familiares”, denuncia Vicente Jiménez, responsable de la Federación Agroalimentaria de CCOO en Toledo.
“Con sus procedimientos inquisitoriales y gansteriles y su actitud claramente antisindical, el gerente ha generado un clima irrespirable y ha dividido a la plantilla buscando cargarse al Comité y poner un nuevo Comité de ‘brazo de madera’ que acepte la rebaja salarial y la ampliación y modificación de jornadas”
CCOO ha reclamado insistentemente la intervención de la Inspección de Trabajo, que llegó a remitir a la fiscalía un informe sobre lo que está ocurriendo en Ibercacao. El sindicato tiene también pendientes de juicio numerosas denuncias ante los tribunales, incluidos los recursos contra los despidos disciplinarios, a nuestro juicio claramente improcedentes.
“No entendemos cómo los propietarios del grupo Lacasa no frenan al gerente de la fábrica de Quintanar, que está diezmando y emponzoñando a la plantilla, masacrando psicológicamente a los miembros del Comité de Empresa y a sus familiares a base de amenazas y sanciones; y generando un clima laboral irrespirable e impropio de un país democrático y avanzado”.
