“Todos los elementos se han ensamblado para hacer algo visualmente muy potente”

Con un flashback. Así empieza la representación de La Celestina, la obra que recala este martes 30 de mayo en el Teatro-Auditorio ‘José Luis Perales’ de Cuenca. Una adaptación de Eduardo Galán en la que se reúnen actores y actrices de la talla de Anabel Alonso, José Saiz, Víctor Sainz, Claudia Taboada, David Huertas y la conquense Beatriz Grimaldos. Y es precisamente ella quien desgrana en una entrevista a Las Noticias de Cuenca los entresijos de la puesta en marcha de una obra que promete “hacer reír al público”. Además, al haber adaptado el texto original de Fernando de Rojas se ha modificado el vocabulario a uno mucho más actual para que el público conecte con la obra desde el minuto cero. Una representación especial para Grimaldos porque “volver a actuar en casa es un regalo”.

 

Esta adaptación de La Celestina es poco convencional por la manera de empezar y acabar la obra...

Sí, la versión que ha hecho Eduardo Galán plantea La Celestina de una manera diferente a nivel de dramaturgia porque se ha quedado con la esencia del texto. La obra empieza ya con la muerte de Melibea y Celestina, hay un flasback y eso es muy interesante. A partir de ahí comienza esta obra en la que se proponen cosas muy diferentes. En mi opinión, creo que es una adaptación muy acertada porque le da vuelo al texto. 

 

¿Qué se va a encontrar el público?

Se va a encontrar con una obra muy dinámica, en la que va a ver como el amor y el dinero son los motores de la vida. Va a ver un espectáculo que, aunque dura una hora y cuarenta y cinco minutos, se pasa volando por el dinamismo de las escenas. La Celestina es una tragedia pero en este caso, la adaptación hace que representemos una tragicomedia y el público se va a reír bastante. 

 

Se ha llevado a cabo una adaptación del lenguaje con un vocabulario mucho más moderno y actual... 

Sí, hay que tener en cuenta que La Celestina se escribió en el siglo XV y Fernando de Rojas la creo para un público erudito. Con esta adaptación, Eduardo Galán y Antonio Castro Guijosa han querido acortar el texto porque el original es inmenso y, a  parte han intentado proponer un lenguaje más accesible para que el público conecte fácilmente con lo que se está diciendo.  

La novedosa adaptación llevada a cabo por Eduardo Galán sobre el texto original de La Celestina permitirá al espectador conectar con la representación desde el primer momento gracias a los cambios de vocabulario realizados

¿Esa es también una fórmula para intentar acercar los textos clásicos al público joven?

Claro. Es cierto que la obra está contextualizada porque el vestuario te lleva a una época concreta, aunque no está determinada por  completo. Es un texto que nos interpela y que a día de hoy sigue teniendo sentido porque habla de las ambiciones humanas, de a dónde estamos dispuestos a llegar por ellas, del amor romántico como enfermedad y falsa cura... Todas estas cuestiones nos resuenan a día de hoy y hacen que esta obra sea de absoluta actualidad. 

 

Para lograr ese dinamismo en la obra hay que trabajar mucho para conseguir una puesta en escena perfecta... 

Sí, al final todo suma. El vestuario, la iluminación, la escenografía y los efectos sonoros son elementos que se han puesto al servicio de un texto y de una propuesta escénica. Todos los elementos se han ensamblado muy bien para hacer algo visualmente muy potente, bonito, directo y carnal. Además, llevamos una escenografía móvil que los actores y actrices estamos constantemente moviendo para crear los diferentes espacios. 

 

En esta obra interpreta a Elicia y Lucrecia, ¿cómo ha sido trabajar dos personajes a la vez?

En esta obra doblo personaje al igual que varios compañeros. Hago de Elicia que es una prostituta y de Lucrecia que es la criada de Melibea. La verdad que ponerme en la piel de ambas es un regalo porque, aunque son dos personajes pequeñitos, poder interpretar a estas dos mujeres con energías tan diferentes está siendo muy bonito. Hay que centrarse y saber dónde estás en cada momento pero con un cambio de energía consigo construir los personajes. Durante la obra estoy constantemente entrando y saliendo del personaje, cambiando de ropa pero me está encantando la experiencia. Está siendo muy enriquecedor. 

 

Trabajar de la mano de un equipo como este hará más fácil el trabajo... 

Sí, está siendo una delicia. El equipo humano es maravilloso y al final eso es lo más importante. Con La Celestina nos enfrentamos a una gira muy larga con muchas ciudades y es importante estar contento en el trabajo. Además, trabajar con actrices como Anabel Alonso es un regalo porque a parte de ser una gran actriz es una mujer encantadora, estoy aprendiendo de ella en muchos sentidos.

La compañía actuará en Puebla de Almenara este verano y también en otros puntos de la región como el Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro

Tienen prevista una gira larga con La Celestina. ¿Volverán a recalar en Cuenca?

Por ahora no, aunque todavía hay ciudades y pueblos que no están cerrados por lo que es posible que se amplie la planificación que tenemos hasta ahora. Estaremos también en otros puntos de Castilla-La Mancha como en el Festival de Teatro Clásico de Almagro. En todo caso, actuar en el Teatro-Auditorio de Cuenca me hace muchísima ilusión porque volver a casa siempre es un regalo. Cuando te pasan la gira y dentro de todas las ciudades está Cuenca es muy significativo para mí porque siempre se agradece actuar rodeada de los conquenses.  

 

¿Algo que decirles?

Que vengan a disfrutar de la obra. Sé que es una fecha complicada por el puente de la Virgen de la Luz pero, por favor, que se animen a venir a ver La Celestina. Es un montaje que merece la pena. 

 

¿Qué proyectos tiene entre manos Beatriz Grimaldos?

Voy a rodar unas secuencias para una película y estoy a la espera de ver si sale adelante un proyecto que no puedo desvelar. Hasta abril de 2024 estaremos girando por toda España con La Celestina e incluso es muy probable que lleguemos a ciudades latinoamericanas. Aún así voy compatibilizando con pequeños papeles en cine y series.