A escasas semanas de cerrar el año 2025, Mesfin Escamilla atraviesa un gran momento en su aún corta trayectoria. Esta joven promesa del atletismo conquense es ya un nombre consolidado en el panorama nacional y lo está refrendando con grandes resultados. Tras un periodo marcado por las lesiones, su retorno, competitivo y estable, le devuelve al foco nacional en categoría sub-23, especialmente tras su último logro: quinto a nivel nacional en el Campeonato de España de Campo a Través por clubes y campeón con su equipo, el Club Atletismo Guadalajara.
Escamilla reconoce que volver a la modalidad de campo a través tenía un componente emocional evidente. “Una alegría volver a la competición de cross porque llevaba un año fuera y no sabía cómo iba a ir la carrera”, explica. El desafío era doble: regresar y medirse por primera vez a los atletas del año 2003, mientras que él es de 2005. “Son muy duros… pero bien, feliz de volver y de ganar la medalla por equipos. Llevamos un gran equipo”, apunta.
Su calvario físico comenzó tras el Mundial celebrado a principios de 2024 en Belgrado. Llegó tocado, se lesionó y su temporada quedó anulada desde marzo. “No he podido competir nada. Volví en noviembre o finales del 2024 y luego bastante bien”, resume. La estabilidad llegó a partir de enero-febrero de este año, cuando pudo entrenar con normalidad. “Salió a la luz el trabajo que hice”, celebra el joven, sabedor de que no es fácil en el deporte que se refleje en las competiciones todo el esfuerzo que hay detrás.
Escamilla ha entrado en la convocatoria para el Europeo que tendrá lugar en Portugal el próximo 14 de diciembre
RECUPERANDO SENSACIONES
La clave de la recuperación, cuenta, fue sostener la confianza pese al parón. “Entrenas haciendo otras cosas para mejorar o recuperarte cuanto antes. Estás parado de poder entrenar corriendo, pero haces otro tipo de entrenamientos para mantener y cuidarte más que nunca”, recuerda. El cross es, además, un terreno que le motiva de forma especial, algo que ya demostraba hace años en el Club Atletismo Cuenca. “Me encanta el cross… ahora tenemos el Europeo, así que tenía motivación para entrenar. Si tenemos una competición internacional, mucho más, ahora está por los aires”. Escamilla, que estaba pendiente de la lista para el Europeo del próximo 14 de diciembre en Portugal, ha sido incluido finalmente tras su cuarto puesto en Itálica y quinto en España.
El día a día del conquense transcurre en el Centro de Alto Rendimiento de Madrid y la Residencia Joaquín Blume, donde lleva a cabo una exigente dinámica en cuanto a sus entrenamientos. Consciente del proceso que vivió, extrema los cuidados. “Ahora estoy cuidándome más todavía… hago preventivos, lo que me mandan fisios y médicos. Intento no tener que pasar otra vez por lo mismo”, cuenta.
De cara al 2026 espera continuar con las buenas sensaciones, y aunque no hay un plan definido hasta que no termine el año, sí que se marca algunos objetivos: “Acudir a los campeonatos de España, sobre todo en enero. Tenemos campeonato de España de cross… El primer objetivo será seguir preparando el cross y el nacional”. En pista, su enfoque está en las pruebas de fondo, otra de sus especialidades: los 5.000 y 10.000 metros. A final de año, eso sí, espera volver a casa para disputar una cita que también es especial para él: la Carrera del Pavo, la cual ganó en 2023. “Si no me pasa nada y estoy bien, estaré en la carrera por supuesto”, comenta.
El regreso de Escamilla le deja como uno de los nombres a seguir en el fondo español sub-23 de este cierre de año.
