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Una selección de obras del Museo de Arte Abstracto viajará por el mundo en 2022

El espacio aprovechará para realizar la muestra el tiempo en que parte de las instalaciones tendrán que cerrar para acometer la climatización
Una selección de obras del Museo de Arte Abstracto viajará por el mundo en 2022
31/07/2021 - Dolo Cambronero

El 1 de julio de 1966 abría sus puertas el Museo de Arte Abstracto de Cuenca. Enclavado en las emblemáticas Casas Colgadas, continente y contenido multiplican exponencialmente su valor para ofrecer una experiencia única al visitante.

Tras la gran reforma acometida en 2016, el espacio quiere adecuarse ahora técnicamente al siglo XXI acometiendo un proyecto de climatización en la segunda mitad de 2022, momento que se aprovecharía para llevar a cabo una exposición itinerante con una selección de obras del museo conquense y que tendrá un recorrido nacional e internacional.

Así lo explica Manuel Fontán, director de museos de la Fundación Juan March, que gestiona el espacio conquense desde el año 1981 aunque la titularidad es del Ayuntamiento de Cuenca. “Queremos poner el espacio en el siglo XXI al menos en sus condiciones técnicas con un sistema de climatización que respete un edificio tan complicado como son las Casas Colgadas y que permita que la experiencia de visitar el museo y la conservación de las obras se produzca en las mejores circunstancias”, añade el responsable.

El proyecto se ejecutará de la mano del Consorcio Ciudad de Cuenca y para llevar a cabo la intervención será necesario ir cerrando salas del edificio paulatinamente. “Es una obra muy compleja porque hay que climatizar todo el museo y que el resultado no se note. Y eso tiene su dificultad. Estamos organizando para que se cierre el menor tiempo posible y esperamos que no necesitemos cerrar todo el museo”, apunta Fontán. 

 

Una selección de obras del Museo de Arte Abstracto viajará por el mundo en 2022

El tiempo que duren los trabajos se pretende aprovechar para organizar una muestra itinerante con parte de las obras que dan vida a este museo y que visitará varias ciudades españolas y viajará también por Europa y EE.UU.

“Es una exposición que va a contar el carácter pionero de estos artistas en los márgenes de la cultura oficial del franquismo de los años sesenta y de este proyecto, que acabó siendo el primer espacio dedicado al arte contemporáneo en nuestro país”, subraya. Fotografías y diversa documentación complementarían la muestra.

La selección de obras volverá después a Cuenca y se instalarán en un museo que desde la Fundación esperan que “externamente no cambie mucho pero que internamente sí lo habrá hecho porque estará totalmente climatizado”. 

Hasta que se inicie esa intervención, se trabaja en diversas exposiciones temporales. En la actualidad y hasta febrero, el museo está inmerso en el proyecto llamado Una historia del arte reciente (1960-2020), un juego entre su propia colección y la de la empresa de seguros DKV, entremezclando así las obras de entre los años 50 y 70 del espacio conquense con los trabajos de artistas del siglo XXI, algunos de los cuales siguen la tendencia de los autores pioneros que conformaron el Museo de Arte Abstracto. 

 

Una selección de obras del Museo de Arte Abstracto viajará por el mundo en 2022

“Tiene la peculiaridad de que ocupa todo el espacio, es decir, se establece un diálogo entre todas las obras no en el reservado para exposiciones temporales sino en todo el museo, desde la entrada hasta el final”, cuenta el director de museos de la Fundación Juan March. 

Posteriormente y hasta junio, cuando está previsto que comiencen con los trabajos de climatización, tienen en programa una exposición dedicada a Ángel Ferrant, escultor español de la segunda mitad del siglo XX muy comprometido con la pedagogía artística, y después un proyecto dedicado a Pablo Helguera, un artista y educador mexicano-norteamericano al que se invitará a intervenir en el museo. 

Para Fontán, en el museo se dan tres conjunciones que lo convierten en un sitio muy especial. La primera es que se da una unión “casi perfecta, milagrosa entre la arquitectura, casi doméstica, representativa del siglo XVI y el contenido, arte abstracto contemporáneo del siglo XX”.  

La segunda sería la relación entre lo público y lo privado, dado que la titularidad del edificio es del Ayuntamiento de Cuenca pero siempre lo ha gestionado una empresa privada: primero Fernando Zóbel y posteriormente la Fundación March a partir de 1981. “Y eso también lo hace especial”, considera.   

La tercera conjunción se materializa en que el edificio más icónico de la ciudad, las Casas Colgadas, contiene la que quizás sea la institución cultural más relevante. “Hay una serie de coincidencias en Cuenca que son muy llamativas, irrepetibles”, celebra. 

“Son cinco pisos enrevesados, de un edificio medieval muy complejo, con escaleras, pero creo que el museo está muy bien resuelto. No ataca el contenedor histórico y consigue un resultado muy bueno”, considera.

El espacio acaba de cumplir 55 años con el desafío de continuar siendo un referente. Para Jesús Carrascosa, el director de la Fundación Antonio Pérez, el museo “fue y sigue siendo clave” y, a su juicio, contribuyó, al igual que la Semana de Música Religiosa, a forjar la identidad cultural de la ciudad. “No debemos perder las señas de identidad”, recalca.             

 

Una selección de obras del Museo de Arte Abstracto viajará por el mundo en 2022

Por su parte, el periodista José Luis Muñoz Ramírez, apunta que el museo supuso sin duda “un punto y aparte en la vida de la ciudad”, al tiempo que posibilitó recuperar las Casas Colgadas de un modo “noble y útil”.

Para Fontán, “el paso del tiempo tiene un doble efecto: por un lado, consagra lo que pervive pero, por otro, hace acumular como una especie de capa de olvido”.

“No queremos que eso le ocurra al Museo de Arte Abstracto, que seguirá siendo lo que fue, un lugar especial y pionero en nuestro país y, como decía el fundador del Museo de Arte Moderno de Nueva York, Alfred Park, que visitó Cuenca en enero de 1977, seguirá siendo el pequeño museo más hermoso del mundo o por lo menos uno de los pequeños museos más hermosos y eso no lo puede decir cualquier ciudad”, concluye.

Una selección de obras del Museo de Arte Abstracto viajará por el mundo en 2022