La Asociación de Daño Cerebral Sobrevenido de Castilla-La Mancha (ADACE CLM) ha ampliado instalaciones en Cuenca con la apertura de un nevo Centro de Atención Directa (CAD) que permitirá aumentar servicios y mejorar la atención que requieren las personas con daño cerebral, pero también la que se presta a los familiares.
En estos momentos, la asociación atiende a unas ochenta personas en Cuenca y la previsión es aumentar la cifra puesto que el nuevo centro permite mayor capacidad que las instalaciones anteriores. Si bien, durante la presentación del CAD la directora de ADADE, Ana Cabellos, advertía que pronto se quedarán pequeñas.
Y es que, según destacaba, los casos de discapacidad causada por un daño cerebral sobrevenido van en aumento. Los ictus son la principal causa y además en los últimos tiempos la incidencia de este tipo de accidente cerebrovascular en la población está bajando la media de edad.
“Están viniendo muchos jóvenes” señala Cabello, quien recuerda que el rango hace tiempo que bajó a una edad diana entre los 45 y 50 años, pero ahora se están detectando muchos casos tempranos, “incluso entre niños de 6 o 7 años”.
Además, destaca que a raíz de la pandemia se ha detectado un aumento de usuarios con una problemática más aguda en lugar de la cronificada a la que estaban más acostumbrados a tratar.
Esta situación, junto a los nuevos casos que están llegando como consecuencia de las secuelas generadas por la Covid persistente, ha llevado a la asociación a dar un paso más y pedir el registro sanitario.
“Seguimos siendo un centro de servicios sociales pero debido a los nuevos perfiles que nos están llegando queremos poder ofertar algo más”, apostillaba.
El daño cerebral es una pluridiscapacidad crónica con múltiples secuelas cognitivias, físicas, sensoriales, comportamentales, o integración sociolaboral. A pesar de ser uno de los grandes desconocidos, la incidencia poblacional es muy alta. De hecho, según destacaba el director general de Discapacidad del Gobierno de Castilla-La Mancha Javier Pérez, afecta a un 9,5% del colectivo en el país, con unas 450.000 personas afectadas, de las que 20.000 son de Castilla-La Mancha, “lo que prácticamente supone un 1% de la población total”.
De estos casos, el 84 por ciento de los daños cerebrales sobrevenidos se producen a causa de ictus, y un 16%, “y cayendo”, como consecuencia de traumatismos. De los aproximadamente 100.000 nuevos casos anuales, más del 25 por ciento en menores de 65 años, por lo que para Javier Pérez “es un reto que tenemos que afrontar como país en el ámbito social y sanitario, porque se trata de casos que cambian la vida de un día para otro”.
De ahí que destacara la importancia del trabajo que desde hace 20 años realiza ADACE en la región, donde en los ocho centros de atención directa con los que cuenta presta atención a casi un millar de afectados y a sus familiares.
Seguir avanzado en atender las necesidades del colectivo con el mayor espectro posible de servicios es el objetivo que se ha marcado la asociación con el estreno de las nuevas instalaciones, que cuentan con espacios destinados tanto a la atención personalizada como para desarrollar actividades grupales.
Ubicado en la calle Princesa Zaida, 9, el nuevo Centro de Atención Directa de la Asociación de Daño Cerebral Sobrevenido de Castilla-La Mancha en Cuenca se inauguraba este miércoles con un acto que ha contado con la presencia de representantes de todas las administraciones, quienes han coincidido en destacar la importancia de las entidades sociales como “motor de bienestar social”, y les han brindado su colaboración para hacer posible que el proyecto siga creciendo.
En este sentido, desde el Ayuntamiento de Cuenca, el alcalde, Darío Dolz, señalaba que además de institucional, se trabajará para que el apoyo sea también económico. Por su parte, la diputada de Servicios Sociales, Igualdad y Cooperación al Desarrollo, Lorena Cantarero, que igualmente brindaba todo el apoyo de la institución provincial, recordaba que está abierta la convocatoria del programa de ayudas Cuenca Integra, destinado a entidades sociales con el fin de que puedan financiar sus proyectos.
A la inauguración del nuevo centro también asistía la subdelegada del Gobierno en la provincia, María Luz Fernández, delegada provincial de Sanidad, y la presidenta del Fórum de la Discapacidad de Cuenca, Isolina Martínez.
