Fitur vuelve a ser escaparate de tradiciones
Leí, no hace mucho, un pequeño artículo que titulaba “sin cambiar de costumbres no se puede cambiar de vida” y su autor nos decía que: “en medio del cambio, el repetir de los días está lleno de elementos constantes. Costumbres que nos libran de estar tomando continuamente decisiones de manera consciente”.
Y es que hay veces que confundimos costumbres con tradiciones, porque a la palabra Costumbrismo le damos una acepción diferente.
Cierto es que una costumbre es un hábito al que estamos sujetos por cierta adición y mantenemos con ello, nuestra singularidad personal como ser humano o nuestra identidad, si la hemos conseguido.
Pero yo quiero llegar al concepto de Tradición, cuyos elementos definitorios, son el Alma del Pueblo, esa seña de identidad de un lugar, de una comunidad, de una sociedad.
Y la razón por la que las Tradiciones son sumamente importantes para un lugar o para una comarca, es que transmiten valores compartidos, historias y objetivos de una generación a otra. Las tradiciones motivan a las sociedades a crear y compartir una identidad colectiva, que a su vez sirve para dar forma a las identidades individuales.
Las tradiciones culturales son claras manifestaciones de cómo un grupo social percibe el mundo y marca momentos significativos y transiciones de vida.
No hay duda que fortalecen el sentido de comunidad, de pertenencia, da valor a la familia, al grupo, al recuerdo ancestral de los antepasados, al propio germen de vida.
Por eso, en la Feria Internacional de Turismo FITUR, la Excma. Diputación provincial, y la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha, ponen en valor, edición tras edición, las Tradiciones de nuestra Tierra porque en base a esa muestra dan significado a nuestros valores como región o como provincia.
Cuenca, en este caso, tiene mucho que decir. Los pueblos de la Serranía, de la Alcarria o de La Mancha, ofrecen singularidades, ejemplos de identidad cultural y patrimonial, sentimiento en el folclore, en la gastronomía –este año de moda en España, al ser Cuenca capital nacional-, en los atuendos y las celebraciones de peso histórico.
Por eso, Moya con su recinto histórico como enclave inigualable estará presente; y también lo hará Cañete con un video promocional de sus excelentes iconos patrimoniales y naturales, sin olvidar que la Alvarada Medieval cumplirá su 23 edición en este año; Enguídanos con sus parajes naturales y su Kelitber –fiesta íbera-; Villaescusa de Haro y su patrimonio cultural; Horcajo de Santiago con su Vítor; Mota del Cuervo y esos molinos quijotescos que tanto empaque ofrecen al mundo cervantino; El Provencio y sus últimos hallazgos arqueológicos; Tarancón y sus especialidades en tradición y solera; sin olvidar Belmonte con sus luchas medievales, cumpliendo año tras año, su Campeonato nacional.
Por eso, la Serranía tiene un hueco importante en base a todo su complejo natural, pero la Alcarria y su proyecto CEDER siempre está ahí, potenciado sus valores, dejando que al final de mañana, sábado 21, DÍA DE CUENCA, la música de nuestra artista favorita Judith Mateo y su música folk, celta y vanguardista, cierre una jornada intensa en la que toda la provincia y sus recursos, llenarán las inquietudes de los visitantes que quieran acercarse al stand de la Diputación conquense.
