El puente que une Garaballa y la Cueva de la Virgen de Tejeda vuelve a ser transitable
El puente que une la localidad conquense de Garaballa y la Cueva de la Virgen de Tejeda vuelve a ser de nuevo transitable al público tras su reconstrucción en madera. El alcalde, Juan Palomares, ha mostrado su satisfacción porque ya está operativo y agradece la colaboración a todas aquellas personas que han hecho posible su apertura. Entre ellas, Régulo Algarra, el párroco José Carlos, así como otros colaboradores que “han venido a ayudarnos a reconstruirlo así que esperemos que dure más porque es más sólido y más grande”. Las intensas lluvias que se registraron durante el pasado mes de abril provocaron una avenida de agua y “el antiguo puente, que tenía unos 15 años de antigüedad, fue arrastrado del lugar en que se ubicaba”.
El acceso a la Cueva de la Virgen de Tejeda por ese punto en concreto quedó inutilizado y empezó a utilizarse otra infraestructura que va a la “Tejeda la vieja así que hubo que habilitar una senda antigua que es mucha más incómoda y estrecha”. Los vecinos ya pueden utilizar el nuevo puente que “tiene siete metros y medio de longitud, así como un metro veinte de ancho, e incluso hemos puesto un salvavidas por si alguien cayese al río Ojos de Moya”. Esta infraestructura también tiene unas cadenas laterales y una serie de postes para que sea mucho más fácil transitar la misma. Recuerda que el Monasterio de Tejeda está situado a unos tres kilómetros de este puente y se “puede ir en coche y dejarlo a unos 200 metros, pero luego hay que ir caminando por un sendero bien acondicionado hasta la Cueva de la Virgen”.
La actuación que se ha llevado a cabo es una de las que se realizaron dentro del Plan de Obras y Servicios (POS), correspondientes a las anualidades 2021-2022.
