Hallados nuevos fósiles de crustáceos y huellas de carnívoros en Las Hoyas

Desde dos especies nuevas de crustáceos y algunos fósiles de peces hasta el rastro de “el dinosaurio cojo” y nuevas huellas de terópodo se han descubierto en el yacimiento conquense de las Hoyas gracias al II curso de excavación organizado por la UAM y realizado entre el 6 y el 15 de julio.

Los grandes hallazgos han sido dos caparazones de unos 7 u 8 cm de tamaño que pertenecen a dos tipos diferentes de ‘conchostráceos’, unos crustáceos que vivieron en los lagos de hace 120 millones de años. Se han descubierto con la colaboración de un especialista argentino y a pesar de tener que ser estudiados con detalle, los investigadores del yacimiento aseguran que van a ser una noticia relevante para el mundo de la ciencia porque, hasta ahora, solo se tenía registro de ellos en África y Sudamérica.

 La coordinadora de las excavaciones, Ángela Delgado Buscalioni, afirma que la importancia de encontrar estos fósiles en Europa es “tener una confirmación más de la hipótesis que sitúa la península ibérica (entonces isla) como un lugar de paso esencial y de intercambio de flora y fauna entre el resto de continentes”.

PUNTO ESTRATÉGICO

En realidad, las excavaciones estaban centradas en un punto estratégico donde se encuentran restos de diferentes especies y etapas cronológicas que al estar enterrados entre capas de roca caliza han permitido  una buena conservación. 

Así, en las primeras capas de esta zona ya se encontró una pata con tres dedos perteneciente a un Mantelisaurius, especie de dinosaurio herbívoro y presa potencial del ‘concavenator corcovatus’ (más conocido como “Pepito”) que fue registrado por primera vez en las Hoyas y del que esperaban encontrar ahora el resto del esqueleto aunque todavía sin éxito.

Unos niveles por debajo se han descubierto 4 huellas de “el dinosaurio cojo”, según lo llaman los paleontólogos, un terópodo carnívoro del que pretenden hallar más huellas para completar su rastro que posiblemente les lleve a encontrar el esqueleto del animal.

MÁS HALLAZGOS

Por otra parte se han hallado un conjunto de peces de unos 30 cm que se alimentaban de otros peces, los denominados depredadores “amiiformes” y las huellas de un nuevo dinosaurio “corretón”, una de las especies características de este yacimiento. Buscalioni explica que lo curioso de estas huellas es que corresponden con el tamaño del pie de “Pepito” lo que permite saber que tiene unas patas muy largas para dar zancadas y estimar la capacidad de este tipo de dinosaurios para correr: unos 8 o 10 km/h  mientras que un humano puede alcanzar los 30km/h.

Una vez terminada la excavación, el trabajo de los paleontólogos continua en el Museo de las Ciencias de Cuenca, donde tras estudiar los nuevos fósiles y compararlos con especies similares de otras partes del mundo se colocarán evolutivamente y pasarán a formar parte de la colección. Además Buscalioni anuncia que van a seguir trabajando en la digitalización en 3D de las huellas y del yacimiento, del que esperan tener algún mapa para el próximo otoño.

CUENCA, REFERENTE EN PALEONTOLOGÍA

Nuevos descubrimientos en un yacimiento inagotable, como ocurre también con el de ‘Lo Hueco’ en Fuentes, que en los últimos años no ha dejado de brindar a la ciencia nuevas vías de estudio. Dos joyas que convierten a Cuenca en referente de la paleontología a nivel mundial en los últimos años y, lo mejor, es que, después de las excavaciones realizadas, todos los investigadores apuestan por más ‘sorpresas agradables’, a corto plazo.

De ello ha tomado buena nota el Gobierno de García-Page, quien no ha dudado en poner en valor este recurso turístico y promocionarlo como un referente. Así, en el Museo de Paleontológico la Junta de Comunidades está desarrollando su tercera fase consistente en la reestructuración de contenidos en su interior y en la instalación de nuevos dinosaurios en su exterior. Todo para hacerlo más atractivo para los turistas, generar visitas y dinamizar la economía de una provincia que quiere tomar impulso.