Este domingo, 30 de diciembre, se cumplen siete años desde que el Consejo de Ministros - el primero con Rajoy como presidente- decidiera aprobar la propuesta del entonces ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, para que Villar de Cañas acogiera el Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos nucleares.
En un principio el silo nuclear debía estar terminado a principios de 2018 pero se cierra precisamente este año y aún no se ha puesto ni un solo ladrillo. Es más, la construcción de esta infraestructura se aleja después de que el Ministerio para la Transición Ecológica ordenara el pasado mes de julio al Consejo de Seguridad Nuclear suspender temporalmente la tramitación de la autorización de construcción del cementerio nuclear.
Una decisión que fue tomada con satisfacción desde el Gobierno de García-Page, que siempe se ha postulado en contra del silo.
Coincidiendo con esta efeméride, desde la Plataforma contra el ATC en Cuenca insisten en que siempre han defendido que los terrenos son inadecuados y que el Gobierno de Pedro Sánchez “no ha hecho más que dar la razón a la Plataforma, poniendo en valor los datos puramente técnicos y dejando en suspenso el proyecto”.
Consideran a la ex presidenta de Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal, “la gran valedora del proyecto junto a su marido”, pues recuerdan que la empresa de López del Hierro ha recibido 37 millones de euros en contratos vinculados al ATC antes de ponerse ni una sola piedra.
“La historia política de Cospedal ha terminado rodeada de escándalos en los que López del Hierro ha sido un actor destacado, pero su herencia envenenada sigue más allá”, señala la Plataforma a través de una entrada publicada hoy en su blog. Y es que considera que “los compromisos empresariales y políticos de Cospedal los ha tenido que asumir Francisco Núñez”, su sucesor al frente del PP en Castilla-La Mancha, a pesar del “clamor social, político y, sobre todo, técnico que descartan este proyecto”.
Desde la Plataforma lamentan que Núñez defienda ahora un proyecto que tiempo atrás criticó, incluso encabezando una manifestación contra el paso de residuos nucleares por Almansa; e insisten en que no hay datos “rigurosos” que avalen la creación de empleo en el ATC una vez construido.
Para María Andrés, portavoz de la Plataforma, "el brazo de Cospedal es muy largo, pero el PP de Núñez se ha quedado solo en defensa del ATC en Villar de Cañas, puesto que ningún otro partido político u organización social relevante de la región defiende esta infraestructura después de que se dieran a conocer los informes oficiales del CSN que desaconsejaban construir en unos terrenos con problemas geológicos insalvables”.
El Gobierno de Sánchez está elaborando el 7º Plan General de Residuos radiactivos que se hará público en el primer trimestre de 2019, y desde la Plataforma contra el ATC exigirán que se pueda discutir ampliamente por la ciudadanía, de manera que “primen las directrices técnicas y los intereses sociales, en vez de los intereses de los lobbys del sector nuclear, como ha pasado hasta ahora”.
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