Jaime López Molina: el artista comprometido

Unir la vida y el arte y un fuerte compromiso social son las señas de identidad de Jaime López Molina, artista de 37 años, afincado desde hace 17 en Cuenca, que vuelve a sorprender al espectador con su última exposición en Cuenca: ‘Objetos Imposibles’, un mundo paradójico, absurdo, que además encierra una crítica voraz a determinados vicios de la sociedad de masas y al consumismo. Porque Jaime López es, ante todo, un artista comprometido, que habla de los problemas que tiene la gente. Bebe de experiencias y movimientos de mediados del siglo XX, especialmente existencialistas, de artistas como Francis Bacon (1909-1992) y su desoladora vision de la condición humana o “su interesante agresividad plástica”; o el Nuevo Realismo Francés, donde artistas como César o Arman, utilizan los objetos ya usados y los sacan de contexto para convertirlos en obras de arte y acercarlos a la gente;  También del arte conceptual de Duchamp o Beuys, para los que la  idea es la verdadera obra de arte.  “Si tienen que encasillar mi arte es en el compromiso social y mi obra se nutre de eso, de los problemas económicos, políticos, religiosos...”, explica a Las Noticias.

Hasta el próximo 4 de junio, el Museo de Obra Gráfica de la Fundación Antonio Pérez en San Clemente, acoge ‘Objetos Imposibles’, una muestra que conforman 40 ilustraciones digitales realizadas en papel fotográfico. Un universo irreal, fusiones de objetos que nos sitúan en escenarios que lo ordinario sería incapaz de detectar. Como ‘Tiempo perdido’, un reloj donde la esfera es el desagüe de un lavabo; o el preferido del autor, ‘Caballo estático’, una bicicleta estática con cabeza y cola de equino.  La clave, nos cuenta, está en la descontextualización. 

“El resultado es generar un discurso entre el espectador y la obra, usando un tono jocoso, irónico y burlesco”, señala. El proyecto se fundamenta en la poesía visual y busca, sobre todo, “democratizar” el arte. “Lo interesante es el discurso que provocan muchos de los objetos, solo por la imagen o por la fusión de título e imagen”, recalca López Molina.

NUEVOS RETOS

La exposición, que ya visitó con éxito el Centro Cultural de Móstoles el año pasado, ha sido objeto de atención de programas televisivos nacionales especializados en arte contemporáneo. La Fundación Antonio Pérez trabaja ahora en la edición de un catálogo que recoja todas las ilustraciones.

Ésta es la tercera vez que Jaime López Molina expone en la provincia de Cuenca. Anteriormente, presentó en la capital, en la Casa Zavala y en el Centro Cultural Aguirre, el proyecto artístico ‘La condición humana’. 

Su próximo trabajo será la publicación, con la colaboración de la UCLM, de la serie ‘Hambre, Miseria y Orden’, para exponerlo en cualquier campus de la región. 

Este artista solo tiene palabras de agradecimiento para las instituciones conquenses, especialmente la Fundación Antonio Pérez y el área de Cultura de la Diputación, “por el interés que han mostrado siempre por promocionar mi obra”. Aunque tiene claro que “si el artista no se mueve, está perdido”. 

No obstante, considera que Cuenca tiene escenarios y recursos para la promoción artística que, en ocasiones, no se explotan con la intensidad que debieran, “lo que es peculiar y paradójico”.

Así es Jaime López Molina: el artista que hace lo imposible, posible.